Una irregular jornada vivió ayer Joaquín Niemann en el Abierto de Chile. Pero, como él dijo tras los 18 hoyos, remar de atrás es lo que más le gusta. El frío sábado, el chileno dejó el primer lugar con el que partió la tercera ronda y cayó dos puestos, quedando igual de como comenzó, con 11 golpes bajo el par. Está ahí junto a otros tres competidores. Un día marcado por las abejas y el engañoso sol en Pudahuel.

Fue un sube y baja para el talagantino, quien en su primera vuelta al campo del Club de Golf Mapocho dejó tres birdies y dos bogeys. Junto a él estaba quien más lo presionaba, el estadounidense Alex Weiss, quien de iniciar con 10 golpes bajo el par, dejó en -15 su registro en Santiago.

Mientras la confianza del norteamericano crecía, la de Joaco bajaba. De a poco se iba enojando consigo mismo, como lo demostró en la sexta bandera, de par 3, donde fue el único de su grupo que no alcanzó el green. De ahí en más fue una montaña rusa para él: cuatro bogeys y tres birdies en la segunda vuelta completaron su tarjeta.

De los que iniciaron con Niemann, solo el brasileño Alexander Rocha empeoró sus números y del tercer lugar bajó al séptimo, en el mismo grupo que ahora marcha Mito Pereira, quien, después de Joaco, es el mejor chileno de la competencia, con -10.

Por su parte, Weiss, con seis birdies y un bogey, se encaramó a la cima. Otro estadounidense, John Somers, también se metió en la pelea tras dejar en -13 su tarjeta luego de tres días de competencia y empezará en el segundo lugar hoy, en el último día del Abierto.