Joaquín Niemann dio la batalla hasta el final y rozó el top 3 en su despedida del LIV Golf Chicago. El golfista chileno concluyó su participación en el certamen en el puesto cuatro, junto al español Sergio García, luego de finalizar la última ronda con una tarjeta de -4, que dejó en -8 su acumulada. El campeón fue el australiano Cameron Smith, quien cerró con -13, cinco golpes más que el nacional.

El talagantino venía de un sábado positivo, en el que consiguió cerrar con un score total de -4, tras firmar un -3, y meterse entre los diez mejores de la competencia. Terminó la segunda jornada en el puesto nueve, a seis golpes de Smith, quien salió a enfrentar el domingo en la cima de la clasificación y con la primera chance de quedarse con la corona.

La diferencia con la cima de la tabla no era menor y luchar por el título se veía lejano, en una competencia en la que fue de menos a más, tras concluir el viernes con -1. No obstante, Joaco sacó a lucir su mejor versión. Su trabajo con el putt, en los primeros nueve agujeros del sábado, fue impecable. Un golpe de confianza y una muestra de que, cuando el chileno está bien, es muy difícil detenerlo.

Su rendimiento fue parejo desde el inicio. Sobresaliente. Comenzó el recorrido desde el hoyo tres y, de inmediato, demostró que aún estaba vivo. Que, más allá de lograr o no el trofeo, su intención era ubicarse lo más arriba posible. Y un sólido arranque le permitió soñar. Un birdie de entrada, para luego anotar otros dos en las banderas siete y nueve, reflejaron que Niemann estaba absolutamente motivado y con la concentración a tope.

Tal como sucedió el sábado, Joaco sufrió a partir del hoyo 10. Desgraciadamente, por cierto, porque, en ese instante, estaba a apenas tres golpes del liderato. En la bandera 11, tropezó con un double bogey que parecía empañar todo lo bueno que había realizado hasta el momento. Pero se repuso rápidamente, con dos golpes bajo el par de manera consecutiva, en los agujeros 12 y 13.

Niemann enfrentó sus últimos hoyos de la ronda con la posibilidad de seguir acortando su diferencia con sus adversarios de la parte alta. Y lo consiguió en el segundo agujero, el que fue su último del día. Ahí logró un nuevo birdie que lo dejó a apenas un puesto del top 3 de la competencia saudí y, pese a que el double bogey había ensuciado su tarjeta, el chileno puede quedarse tranquilo, porque en ningún momento perdió el foco ni bajó los brazos.

Su opaca presentación en el primer día del torneo terminó pasándole la cuenta en el cierre. De todas formas, Joaco demostró es uno de los mejores y que se está acostumbrando a pelear en los puestos de arriba. En su primera participación en el circuito, perdió el título del Invitational Boston en el desempate, contra Dustin Johnson, el campeón, y Arniban Lahiri, quien finalizó segundo junto al nacional. Poco a poco, el talagantino se afirma en la liga por la que cambió el PGA Tour y no sería sorpresa verlo ganar una corona en las próximas jornadas. Parece ser solo cuestión de tiempo.

Ahora, el nacional debe dar vuelta la página y comenzar a pensar en el LIV Golf Invitational que se desarrollará en Bangkog, Tailandia, entre el 7 y 9 de octubre.