La semana pasada se jugó en Muirfield Village el llamado Workday Charity Open, torneo de emergencia para el calendario donde el ganador anotó 19 bajo el par y el corte de viernes fue en –2. Esos dulces números no se iban a repetir ahora en el Memorial, en el mismo club. Jack Nicklaus, creador y aún responsable de este campo, en Ohio, había adelantado que las condiciones serían diferentes. Iguales para todos, pero no a todos afectan igual.

A Joaquín Niemann le afectó. Hizo dos doble bogeys (ver tarjetas) en la jornada de este viernes: en el hoyo 18, el noveno para él, le costó tres golpes llegar al green (debía ser en dos) a lo que sumó otros tres putts (el ideal son dos), y en la bandera 3, su segundo tiro se fue al agua, lo que le sumó un golpe de penalidad.

Muirfield Village le acomodaba al chileno, ha jugado ahí 14 rondas competitivas, desde el Memorial 2018 cuando marcó 65 golpes el día 1, y aunque había tenido vueltas de 73, ese era su máximo, nunca llegó a los 75 que marcó ayer. El promedio, antes del torneo, era de 70 golpes.

El chileno sumó +4 y pasaron con +3. Es su primer corte fallado en los cinco campeonatos jugados después de la para por el Coronavirus. Antes, la suspensión le había cortado una mala racha de tres cortes fallados consecutivos (sin contar el cancelado The Players).

El torneo lo lideran Ryan Palmer (67-68) y Tony Finau (66-69), con -9, escoltados por el español Jon Rahm, con un palo más (69-67), mientras que Tiger Woods, en su regreso a las canchas tras la pandemia, apenas pasó el corte con ese +3 exacto (71-76).

El chileno no jugará la próxima semana, pues tenía programado descansar para enfrentar en la siguiente el FedEx St. Jude Invitational, el primer World Golf Championship de su carrera. El WGC es un puñado de torneos al que llegan jugadores de los circuitos más importantes del mundo.

Por el Korn Ferry Tour, Mito Pereira es 64º, con +1 (73-71-73), en el TPC San Antonio Championship at the Oaks.