Joaquín Niemann compite en la primera ronda del US Open y las preguntas para él (y para gran parte de los jugadores que están en Brookline) siguen siendo sobre el LIV Golf. La superliga saudí es el tema caliente de la semana y todos quieren saber quién será el proximo rebelde que deje el tour norteamericano y se suba al carro de los petrodólares. El chileno ya admitió que no será uno de ellos.
Tal como Eduardo Miquel, entrenador de Niemann, le había confirmado a El Deportivo, el talagantino no tiene planes de sumarse al proyecto financiando por el Fondo Público de Arabia Saudita. Fue él mismo quien se lo confesó a la revista norteamericana “Golf”.
“Nada que contar de mí. Quiero dar lo mejor de mí para vencer a todos estos muchachos (apuntando la zona de prácticas). Todavía están aquí y mientras estén aquí, no voy a ir a ninguna parte. Ninguna posibilidad”, comentó en medio de la jornada previa a la primera ronda del US Open, el tercer major de la temporada.
Aunque luego dio una frase que gráfica muy bien el verdadero foco que tiene la LIV Golf, “¿Si tuviera 40? Tal vez sería diferente”, comentó. Y es que la liga es mucho más atractiva (y menos riesgosa) para aquellos jugadores que ya pasaron sus grandes glorias en el circuito.
Niemann pese a ser de los mejores del mundo, es un golfista que todavía vive sus primeros años en el circuito al más alto nivel, por lo que ser suspendido del PGA por disputar ocho torneos al año, no es muy lógico.