“Bienvenidos a mi oficina”, dice un sonriente José Pedro Fuenzalida (36). Chapita recibe a El Deportivo en el frontis del estadio San Carlos de Apoquindo. Se sienta en la vereda que da a los estacionamientos, con las estrellas que adornan el techo del reducto precordillerano de fondo. A unos 100 metros, sus hijos disfrutan de la escuelita de fútbol de la UC. “Son buenos, les gusta el fútbol. Uno juega al arco y el otro de nueve. Ya están grandes y es rico disfrutarlos y que ellos me vean jugando”, dice.
Chapita fue designado por segunda vez consecutiva como el mejor futbolista de la temporada 2020. Capitanes y técnicos, en la tradicional encuesta de La Tercera, volvieron a elegirlo como el mejor. “Me gustan estos recuerdos. Los pongo al lado de las medallas que he ganado”, dice, acompañado siempre de su mate y agua mineral. Durante la mañana entrenó junto al plantel pensando en la Supercopa frente a Colo Colo. “Es un partido importante porque marca el inicio de la temporada. Pero tiene un sabor distinto por ser del año anterior porque no se pudo jugar por la pandemia”.
Segunda vez elegido el mejor por sus colegas....
Sí... es una de las cosas más lindas que me ha tocado en el fútbol. Es muy lindo que los pares te valoren y te elijan como el mejor jugador del campeonato.
¿Pensó alguna vez que sería tricampeón en la UC?
No, la verdad que no. Dentro de los sueños que tenía era salir campeón, después cuando planteamos el objetivo de salir tricampeón fue algo lindo porque sentí que se podía dar. Con cambio de técnico era más complicado, pero se dio. Aparte del tri, lo lindo es que fuimos punteros todo el campeonato.
Es el jugador más ganador en la historia del club, ¿Ya cumplió como jugador de la UC?
Siento que le he dado al club así como el club me ha dado a mí. Como hincha de la UC siempre soñé con estar acá. Tuve la suerte de que el club me recibiera en las inferiores, que me diera todo. Después me dieron la oportunidad de volver. Ellos me dieron la oportunidad de volver y siento que en la cancha les he respondido, he podido devolver algo concreto, con mis compañeros, que son los títulos.
¿Se siente leyenda en la UC?
No, no me gusta ponerle nombre ni apodo a mi situación. Ni Chapadiós, ni nada. Soy un jugador que ha ganado títulos en este club y eso me pone contento. Soy un jugador más, que junto al resto de mis compañeros hemos tenido buenas temporadas. Eso me pone en un lugar privilegiado de ser uno de los jugadores con más títulos en la institución.
¿Le gustaría que una tribuna del nuevo estadio llevara su nombre?
No, nada. No pido nada. Solo pido que me dejen un par de asientos para ir con mi familia y mis niños. Ellos están felices, vienen a la escuelita, a cada partido. Gozan con la UC.
¿Se imaginó que su carrera se iría dando de esta manera?
No, nunca. Por cómo me veía, por mi evolución... Siempre sentí que tenía condiciones, pero siempre admiré a esos jugadores que ganaban títulos y hacían historias en sus clubes. Yo nunca me imaginé que podía llegar a eso. Siempre quise ser parte de algo importante del club, pero nunca a este nivel. Cuesta imaginarse dónde uno está, quizás más adelante me daré cuenta. Hoy disfruto de estar en el estadio, de verlo, de cada entrenamiento, de todo. Cuando vengo por las calles y veo San Carlos a lo lejos le digo a mis niños: “miren, ahí está San Carlos”. Cuesta imaginarse dónde uno está a cómo uno empezó.
Se le escucha emocionado…
Sí. Es que todo lo que rodea el fútbol me sigue emocionando. Hoy estoy en un lugar, pero uno mira atrás y se da cuenta que todo empezó por algo. Seguramente lo disfrutaré más cuando no juegue y me dé cuenta de todo.
Por su carrera, ¿a mayor edad es menor dificultad?
No, hay muchas dificultades. Uno con edad va aprendiendo a llevar estas dificultades de otra manera. Cuando uno es joven tiene menos experiencia, pero el físico da mucho más. Con la edad uno tiene más preocupaciones, más problemas físicos, más responsabilidad, pero la experiencia te equilibra todo.
¿A mayor edad ha sido más profesional?
Eso se ocupa como que uno ahora es más profesional porque antes no lo fue. Todos hemos sido súper profesionales, en general. Uno cuando es más joven puede llegar a entrenar con un poco de antelación, te cambias y entrenas al 100. Con la edad uno se tiene que preparar una hora antes para recién bajar a entrenar. Eso no te hace más profesional sino que uno se adapta a la realidad de cada uno.
¿Se le hace fácil el fútbol chileno?
No. Yo creo que todo el fútbol tiene sus componentes, sus complejidades, sus cosas buenas y malas. En Chile siempre se trata de jugar muy bien al fútbol. Eso significa que hay más espacio, pero también te exige más físico. Hay un desgaste de desplazamiento que es grande. Con el tiempo uno empieza a conocer mucho los equipos, a los jugadores, y eso te da un plus.
Fue baja durante meses...¿Sintió la edad esta temporada?
No, me sentí muy bien. La lesión fue un tema de tobillo que va un poco más allá. Fue una lesión de tobillo fuerte, que costó recuperarse. No lo atribuyo a la edad. Sí hubo un desgaste sicológico porque nosotros llegamos a jugar 10 partidos más que el resto por la Libertadores, la Sudamericana y el torneo. Eso es mucho. Jugamos casi 30% o 35% de partidos más que el resto a esa altura. Había un desgaste también por mantener siempre el primer lugar durante el torneo. Sicológicamente sí afectó, pero el equipo lo supo llevar.
Su gran deuda es anotar algo internacional con la UC...
Me gustaría mucho que se diera, pero soy realista con las circunstancias. Hemos tenido años muy buenos, pero lo de siempre cambiar de técnico, que es algo muy bueno por cómo está siendo manejado el club, evita que se hagan inversiones muy grandes para pelear las copas. Las copas internacionales se ven un poco lejanas por lo que invierten los otros equipos.
Holan dijo que era irreal pensar en una copa internacional...
Es difícil viendo al resto de los equipos. Lo lindo del fútbol es que es impredecible. Hay equipos con muy poco presupuesto que logran alcanzar los objetivos. Nosotros el año pasado, sacando los primeros dos partidos de Copa Libertadores, que no lo hicimos bien, logramos realizar cuatro partidos muy buenos en la fase de grupos. No nos alcanzó para la Libertadores, pero sí para la Sudamericana. En Copa Sudamericana quedó el bichito de que podríamos haber alcanzado algo más.
¿Pensó que se le arrancaba el título del torneo?
No. Sentía que iba a estar disputado hasta el final y que el partido clave iba a ser con La Calera. Se dio así. La diferencia de los ocho puntos al final refleja la realidad. Creo que nosotros tuvimos 20 o 25 fechas muy buenas, marcando mucha diferencia y jugando dos torneos. Después hubo muchos partidos que no jugamos y tuvimos que enfrentar en nuestros días libres. Se juntaron muchos lesionados, un desgaste físico importante, un desgaste de todo.
¿Como capitán no le molestó que vendieran a mitad de temporada a jugadores como Pinares y no los reemplazaran?
A Pinares no había forma de retenerlo. Contratar a esa altura, a un jugador de esa calidad, sin ser extranjero por todas las trabas que existían en ese momento, era complicado. Lo que pasa es que no se dio de buena manera porque Marcelino Núñez, que era por quien el club puso un poco las fichas, tuvo unas lesiones, no se pudo recuperar. Se improvisaron muchos jugadores en ese puesto. No es lo ideal, pero se entiende que fue por la circunstancia del año. Así se nos fue Benja Kuscevic, Pinares. No es bueno, siempre será negativo para el equipo que se vayan jugadores a mitad de temporada, pero es algo que nosotros tenemos que aceptar.
Sus compañeros dijeron que el arbitraje los quería perjudicar. ¿Usted lo sintió?
El tema del arbitraje es algo que está en adaptación por el Var. Se cometieron muchos errores en contra nuestra y menos a favor nuestro. Pero no me gusta echarle la culpa al arbitraje. Tenemos que ser precisos y decir que tuvimos un bajón que nos hacía ofuscarnos más con los árbitros.
Aued exigió por Instagram que la dirigencia se hiciera respetar por los arbitrajes. ¿Comparte?
Hubo un momento en que sí nos estábamos jugando el título, teníamos muchas bajas y estábamos peleando con lo que teníamos. Hubo partidos en que uno notaba que se podían evitar muchas cosas y había una animosidad distinta. Se habló con los dirigentes y Aued lanzó esa frase para que nos escucharan. No era para que nos ayudaran sino para que no nos perjudicaran. Me deja tranquilo que en la última fecha no pasó nada y el torneo se terminó de jugar de buena manera.
Se hablaba que la UC caería al final como en años anteriores. ¿Se acabó el rótulo de segundón?
Salir segundo en algún torneo habla bien porque se pelea hasta el final. Hemos demostrado en los últimos años, más allá de lo que se pueda decir, que hemos marcado un antes y después de esos títulos. Hoy la gente te lo puede seguir diciendo, pero no tiene mucho fin porque somos el equipo más ganador de la última década.
¿Le molesta que le digan segundón?
Es que no le encuentro mucho sentido. El que lo dice seguramente es un tipo que vive del recuerdo porque probablemente alguna vez nos vio salir segundos, pero no es lo que está pasando ahora.
Beñat, Quinteros, Holan y Poyet...¿Es lo ideal cambiar de técnico cada año?
No, claramente que no. Los procesos muy buenos para conseguir resultados a nivel nacional e internacional implican un trabajo a largo plazo. Eso es algo que no se ha podido dar, más allá de salir campeón. Cada año es una nueva idea, una readaptación al nuevo técnico, y eso por ahí puede llevar un par de meses y te puede perjudicar sobre todo en los inicios de los torneos. Pero es parte de cómo estamos funcionando, de las decisiones de los técnicos.
¿No se van los técnicos por no tener armas para pelear por torneos internacionales?
Por ahí ellos salen campeones acá y tienen proyección de competir por torneos internacionales. Quizás ellos no ven esas posibilidades acá, más allá de que nosotros estamos confiados que con el equipo que tenemos y ciertas incorporaciones lo podemos lograr. Pero es su decisión y están en su derecho.
¿Le sorprendió que se fuera Holan?
Pensé que seguiría, pero al terminar el torneo y escucharlo uno intuía que podía irse. Estamos tranquilos porque los técnicos que se han ido de acá han ido a grandes clubes. Holan se fue a Santos.
¿No existió desgaste con Holan por su exigencia?
El desgaste natural del año, por jugar cada tres o cuatro días casi siempre. Eso genera desgaste, pero es el desgaste natural de toda temporada. Cuando se termina el torneo siempre hay un descanso y ahí se renuevan un poco las energías.
Beñat, Quinteros y Holan. ¿Cómo los ordena según su importancia?
No me gusta catalogarlos. Cada uno le ha dado cosas al equipo. Los tres nos sacaron campeones y solo le doy las gracias.
Poyet quiere una UC más intensa. ¿Se puede?
Siempre se puede ir mejorando cosas. Obviamente con las incorporaciones que tenemos hoy, con Leiva que es muy intenso, Ampuero igual, vamos ganando jugadores que por características te pueden hacer más intenso.
¿Las prácticas de Poyet ya se sienten más intensas?
Recién estamos empezando, todavía estamos en sus primeros días. Creo que los mismos partidos nos darán el rodaje y nos irán ayudando a encontrar nuestra mejor versión.
¿Llegó a dudar de su capitanía por los dichos de Castillo?
Lo hablé con el club y yo no soy el dueño de la capitanía en Católica. La capitanía se elige, el club es dueño y puede elegir a quien quiere. Yo les dije que estaban a libre disposición, pero ellos me dieron todo su respaldo.
¿Por qué cree que Castillo cada cierto tiempo lo repasa?
No sé. Con Nico siempre tuvimos una buena relación tanto en Católica como en la Selección. No quiero entrar más en polémicas. Nico ha pasado momentos difíciles y solo espero que se recupere y vuelva a jugar para que sea el goleador de antes.
¿No habló con él?
No, pero entiendo que tampoco hay que darle tanta vuelta de buscarlo e intentar conversar. En su momento nos iremos a reencontrar y hablaremos.
Carmona y Beausejour a la B, Valdivia a La Calera mientras Pinilla se retira. ¿Es el fin de una generación de futbolistas?
Se dio como un torneo especial, de muchos cambios. Todos empezamos a pasar por esos momentos. Se está dando un cierto recambio en el fútbol chileno que ya se empezó a hablar hace un tiempo en la Selección.
¿Usted se pone fecha para el retiro?
No me pongo límites. Voy viviendo la temporada y mientras esté bien y me sienta bien quiero seguir jugando, más allá del lugar en el que me toque. En Católica quiero estar hasta que sea un jugador muy competitivo y pueda darle al club lo que se merece. Es un club que siempre tiene que pelear títulos, pelear copas internacionales. El día que sienta que no estoy para ese nivel tendré que buscar otros lugares, pero por ahora quiero seguir acá.
¿Solo piensa retirarse en la UC?
Irá de la mano de lo que vaya sintiendo en lo personal, como familia. Sí me encantaría seguir jugando, con mucha gente en los estadios. Me quiero retirar bien de Católica y si es el fin del fútbol, bien, o si me tengo que ir a otro lado a seguir jugando, también. Pero sé que acá quiero cerrar bien el ciclo.
¿Se imagina jugando en el estadio nuevo de la UC?
Sería muy lindo, quedan un par de años, pero vamos a intentar seguir bien en lo físico, aportar al equipo, y si eso me da para estar en el estadio nuevo, ahí vamos a estar.
¿Por qué apoyaba el paro de los futbolistas?
Se han ido tomando decisiones en el fútbol chileno que hoy lo tienen un poco entrampado. Se acumulan malas decisiones que después se tratan de corregir. Todavía estamos en un periodo en que aún no se puede encauzar bien el tema de la Segunda División, el tema de los ascensos y descensos, la cantidad de los equipos, la repartición de la plata de los derechos de televisión. Es un montón de cosas que aún no se arreglan. Y por eso era un poco este paro. Nosotros los futbolistas siempre vamos a buscar una competencia sana en la que se premie al ganador y descienda al que le corresponde.
¿Los dirigentes buscan apernar a sus equipos en el fútbol profesional?
El fútbol ha cambiado harto porque se maneja más como negocio y estamos en esa etapa en la que hay que tener mucho cuidado. No se puede permitir que el fútbol sea netamente una empresa. Hay mucha gente involucrada, mucho fanatismo y eso muchos lo olvidan. Manejar un equipo no es lo mismo que manejar una empresa.
¿Le preocupa que los representantes se tomen el fútbol?
Lo que a mí me preocupa es que el fútbol se tome para lo que no está hecho. El fútbol está hecho para competir y al que le va bien, buenísimo, y al que no le va tan bien, tendrá que mejorar. El fútbol no es para andar haciendo cosas que no corresponden y que van ajenas a la competencia.D