La derrota por 0-73 para los Cóndores pasó a segundo plano. Pese a que los Maorí All Blacks fueron muy superiores a la selección chilena de rugby, se cumplió el objetivo de medirse a una potencia mundial.
Por lo anterior, es que el análisis que hicieron los chilenos, luego de la caída, no fue tan lapidario. Por el contrario, el mensaje que dieron es esperanzador. "Fue espectacular, jugar con tanta gente es una experiencia única ante un equipo de nivel mundial. Es un orgullo estar acá. Sacamos un punto de medición con un equipo de nivel mundial. No siempre tenemos estos partidos ni con tanta gente, nos da la experiencia de a donde queremos ir. Agradecidos de la gente que vino, estaba lleno y fue espectacular, una experiencia única para el rugby nacional", dice el fullback Tomás Ianiszewski.
Por su parte, el experimentado Felipe Brangier comenta: "No cumplimos con nuestras expectativas de resultado pero sabíamos que no era lo que importaba. Hay muchas otras lecciones. Jugamos contra el mejor país del mundo en este deporte versus una realidad completamente amateur que estamos tratando de romper. Hartas lecciones positivas, un día soñado para el rugby chileno".
"Esperar que todos los partidos de Chile sean en estas condiciones, con un estadio profesional y las galerías llenas", concluye Brangier.
"Tuvimos 20 minutos bastante fuerte pero el nivel físico y el ritmo que ponen ellos nos jugó en contra y no supimos salir de esa situación porque no lo hemos vivido antes. Se tiene que trabajar a una intensidad más alta de lunes a viernes. Es parte de lo que se trataba este partido, enfrentar a los All Blacks es el sueño de cualquier rugbista", añade Marcelo Torrealba.
Por su parte, Vittorio Lastra, del Verona italiano, dice que el juego fue una experiencia increíble. "Una oportunidad única de medirse contra una selección más fuerte. Creo que hay una diferencia y se nota, pero te das cuenta jugando con ellos que son personas como uno y que están ahí. Es una brecha de entrenamiento, físico y táctico que se ha dado por situaciones de entrenamiento. Ojalá se despegue ahora como Federación y equipo. Con Pablo Lemoine se nota que se ha hecho las cosas distintas y que la Federación está trabajando para que el rugby crezca", agrega
En la otra vereda el portavoz fue Ash Dixon, quien además fue uno de los más aplaudidos en el partido. "Es difícil comparar hablar de los jugadores chilenos, porque en Chile el rugby no es el primer deporte. Tuvieron la oportunidad de hacer un partido de gran nivel. Van etapa por etapa buscando nuevos objetivos y los chilenos se pararon frente a un equipo profesional donde el rugby es el primer deporte", cierra el maorí.