La Audiencia de Barcelona ha acordado enviar a juicio al futbolista Dani Alves por presuntamente agredir sexualmente a una joven en una discoteca de Barcelona en diciembre de 2022.

Así, el tribunal confirmó el fin del proceso de investigación del caso para pasar al siguiente paso que es decretar la apertura del juicio en contra del brasileño. Con este último proceso, las partes cuentan con un total de cinco días hábiles para presentar sus escritos de calificaciones provisionales, en los que deberán argumentar si Alves debe ser absuelto o condenado y, en este último caso, qué pena se le debe aplicar.

De esta forma los magistrados concluyeron que las declaraciones de la víctima y los testigos, así como las pruebas periciales, presentan suficientes indicios para llevar a Alves a un Juicio por agresión sexual.

Todo este proceso se inició la noche del 30 de diciembre de 2022 tras la denuncia de la víctima. El exjugador del Barcelona acudió semanas después a declarar y el Juzgado de Instrucción 15 de Barcelona terminó ordenando su ingreso a prisión preventiva, principalmente por considerar que el riesgo de fuga era alto.

Desde entonces, el ex seleccionado brasileño ha cumplido diez meses en esta condición, después de que se le rechazara en dos ocasiones la petición de su defensa de terminar con esta medida cautelar.

Ahora, una vez que sean enviados los partes sobre la absolución o condena del brasileño, se deberá fijar la fecha en la que se inicie el juico oral, que se espera para inicios de 2024.

Este es un nuevo golpe para Alves, ya que su ex esposa Dinorah Santana acusó que el futbolista solo la utilizó para que lo defendiera, iniciando una demanda en contra del defensor por coacción.

“Fue el 6 de mayo cuando entré con los niños a prisión la última vez que lo vi. No me ha llamado más, desapareció. Pero no me importa ni me interesa. Eso me hizo dar cuenta que nos utilizó cuando estaba pidiendo la salida de prisión. Nos utilizó desde que llegamos y luego nos ignoró completamente, pero más a sus hijos”, indicó Santana en una entrevista con el programa Fiesta del canal Telecinco de España.

Luego explicó cómo fue la forma el futbolista intentó convencer al juez para demostrar su presunta inocencia. “Yo sabía lo que debía decir cuando llegara al aeropuerto y cuando salía de la cárcel con los niños (a la prensa). Estaba en un grupo de WhatsApp en el que había gente de prensa y abogados. Ellos me decían lo que yo tenía que decir. Me aprendí todo lo que tenía que decir, eso surgió de la defensa porque su mujer estaba muy dolida por la infidelidad y lo quería dejar. Nadie lo podía defender y, ¿quién lo iba a defender? Su familia. Él ya no tenía credibilidad. Entonces, Dinorah lo defiende”.

Por último, contó que “estoy con medicación y, para mí, él ya ha muerto. Lo que quiero es que me deje a mí y a los niños en paz. Que arregle su vida y cuanto antes que salga de la cárcel, mejor vivirán mis hijos. Imaginarse que su padre puede ser un violador no es nada fácil”, sostuvo.

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