Kike Acuña es profesor y alumno. Cada lunes, desde su hogar, se conecta a su computador para seguir con sus estudios en INAF y convertirse en un director técnico titulado. Mientras, enseña desde la experiencia. Tiene a su cargo a la sub 17 de Unión San Felipe, su ex club.
Así se la pasa. También sueña. Tiene sus metas claras como DT, las que le cuenta a La Tercera, además de anécdotas y su postura ante la ola de memes de la que es protagonista en las redes sociales, por su pasado fiestero. Todo lo toma con humor.
¿Qué tal sus días de cuarentena?
Aquí en casa encerrado nomás. Lo principal que hago es estar con mi hijo, lo baño, lo mudo y lo veo crecer. Mandando trabajos a los jugadores de la sub 17 de San Felipe también. Cuando salgo, por ejemplo al supermercado, voy tapado entero, con mascarilla, gorro, tratando de ser lo más precavido posible. Y leyendo mucho, viendo artículos en Youtube, de donde se puede sacar aprendizaje. Y los lunes estudiando online en el INAF, mi tercer año para titularme como técnico profesional. Siempre me levanto temprano, riego el pasto, les doy comida a los perros, y desde ahí no paro hasta las 0.00 o 1.00 de la mañana.
¿Por qué estudia solo los lunes?
Los jugadores y ex jugadores solo lo hacen ese día, desde las 8 a las 21.30 horas, todo el día. Es estresante, sobre todo ahora que es online, por Zoom y otras aplicaciones. Ir al instituto era distinto, lo más cercano a un camarín para los que estamos retirados, porque uno se ríe mucho y comparte con los compañeros. Hay muchos jugadores haciendo el curso. Es una terapia ir, pero en el computador es estresante porque te duele la cabeza, la vista o algunos no tienen muy buena conexión y otras cosas. Pero hay que sacar el título, eso es lo importante para mí al menos.
¿Qué futbolistas reconocidos se topa en el instituto?
Muchos. Albert Acevedo, Cereceda, Miguel Pinto, Manuel Villalobos, Dunga Pinto, Adrián Rojas, Nicolás Suárez, Diego Silva, y se me olvida el resto. Debe haber unos 20 activos. No todos vamos juntos, algunos están en primero o segundo año, pero nos juntamos en los break a almorzar. Se pasa muy bien. Es súper rico ir los lunes.
¿Son desordenados los futbolistas en el aula?
El futbolista de por sí es medio pelusón. En el caso mío, me gusta tirar la talla, siempre he sido igual, entonces obviamente igual hay tallas. De repente miras la ventana de un compañero, de Manuel Villalobos por ejemplo, y lo ves con los ojos cerrados porque está raja durmiendo, o Diego Silva haciendo cosas que producen risas. Se pasa bien, pero uno se desconcentra más rápido.
¿Chutean en el recreo?
Hay algunos que juegan tenis fútbol, yo por lo menos no lo hago.
¿Y quién sería el más mateo del grupo?
El más capo es Adrián Rojas. Es mateo, se saca buenas notas y como nos conocemos siempre está dispuesto a ayudarte.
¿Hoy vive de su trabajo con la sub 17 en San Felipe?
Sí, estoy muy agradecido, porque el presidente Raúl Delgado tuvo una reunión con nosotros en la cual nos dijo que nos quedáramos tranquilos si eran cuatro o cinco meses que nos tuviéramos que quedar en la casa sin ir a entrenar, porque el sueldo se iba a pagar completo sin tocar ni un peso.
¿Como es usted como técnico?
Soy un técnico en formación. Tengo muchos conocimientos y el INAF me está ayudando a ordenarlos. Mi equipo tiene que ser aguerrido, yo era un hueón aguerrido adentro de la cancha, jamás di un balón por perdido y mi equipo tiene que ser de esa característica. Sí me gusta el buen trato de balón porque me crié en la Católica y siempre nos inculcaron eso. Entonces es un equipo que tiene que tener buen pie y ser ordenado. Yo juego con un 1-4-2-3-1, un equipo ordenado que al recuperar tiene que hacer transiciones rápidas para llegar al otro arco para encontrar al equipo rival desordenado y así ganar espacios. Tengo buenos jugadores, alcanzamos a jugar dos partidos donde nos fue muy bien y eso me deja contento. Quiero dirigir San Felipe y para eso me preparo todos los días, aunque sé que es complicado. Mi sueño es que San Felipe suba a Primera A siendo yo el técnico, y generalmente llamo a las cosas y siento que así va a ser.
¿Sueña con dirigir algún otro equipo?
Obviamente, en la Católica.
Es hincha cruzado, ¿no?
Sí, siempre, y llegué a los 11 años. No me quise ir a Colo Colo porque era hincha de la UC. Hay un cariño súper grande y quiero volver a San Carlos. Ya me lo propuse como una meta, es un sueño que tengo y sé que lo voy a lograr.
¿Y si tuviera la posibilidad de dirigir en Colo Colo o la U?
Uno es técnico, y donde te llamen para ir porque necesiten tu servicio hay que estar a disposición, de cualquier equipo. Yo quiero dirigir a Católica, es mi sueño, y si es otro equipo, bienvenido sea, no cierro la posibilidad a ninguno. También me gustaría ir al extranjero. Quiero hacer una carrera de técnico mejor que la que hice como futbolista.
¿Cómo se toma que le hagan memes por su pasado fiestero?
Me encanta. Me alegran el día y me cago de la risa. Ojalá que sigan creando más cosas buenas porque en verdad me cago de la risa. Siempre me gustó que me gritaran cosas sobre cuando salía o el tema de las fiestas. Cuando iba a tomar agua a la banca la gente me gritaba “no, no”, y yo tomaba y hacía arcadas para la gente. Hay un meme de eso. Todas esas pifias, con mis gestos de humor hacia el público, me los echaba al bolsillo y las pifias se transformaban en aplausos. Es algo que manejé bien. Ahora me da risa, tienen mucho ingenio. Hay otro meme donde salgo persiguiendo a Zlatan, él jugando por Suecia y yo por la Selección, y abajo escribieron ‘Ibrahimovic escapando de la caña’, entonces lo encontré buenísimo. Yo mismo de repente los subo a Instagram. Eso indica que la gente está preocupada de ti. Cuando no hablen de ti, preocúpate.
Pero el futbolista en general, ¿es carretero?
Yo hablo por mí. Yo era carretero y la pasé bien, no lo discuto. Me mandé cagadas, unas más grandes y otras más chicas, pero todo eso me llevó a ser la persona que soy hoy, no me arrepiento de nada.
¿Ese aprendizaje lo traspasa a sus pupilos?
Uno les va contando cosas. Tengo una charla pendiente con ellos para contarles toda mi historia, cosas buenas y malas, para que sepan que nada es imposible. Yo fui suplente cinco años seguidos, no me citaron nunca y sin embargo logré ser jugador de fútbol. Con trabajo, sacrificio y ganas todo se puede lograr.
¿Hasta dónde hubiese llegado un Kike Acuña disciplinado?
Yo llegué hasta donde llegué porque cuando salí de Ovalle le prometí a mi familia, teniendo 11 años, ser jugador de Católica, jugar en la Selección e irme a Europa. Tenía 23 años y ya había cumplido todo, entonces se me acabaron los sueños; quizás toqué techo. El resto, si salía o no salía es otro tema. Hay jugadores de nivel mundial que salen todos los días y juegan sin problemas. En Holanda e Inglaterra salíamos siempre. Hasta que me retiré, a los 39 años, corría más que un niño de 20 años. Quizás pude haber abusado un poco de la capacidad física que tenía, porque no me afectaba nada. Fumé casi toda mi carrera, y si me pones en un test físico ten por seguro que lo iba ganar. En Holanda el de mejor capacidad física era yo, en Sudáfrica también. De lo único que me arrepiento es de no haber pensado más allá, de llegar a un equipo más grande en Europa. Firmé un precontrato con la Lazio, le dije que no al Sevilla y al América de México. Tomé decisiones equivocadas y apresuradas que no me permitieron llegar más lejos.
Está planificando su despedida del fútbol.
La idea era hacerla ahora pronto, en junio, pero no hay ninguna posibilidad por todo lo que está pasando a nivel mundial. Quiero conversar con el Tati (Buljubasich) para ver la posibilidad de hacerlo en San Carlos de Apoquindo, hablé con Cristian Álvarez también. De invitados, está Van Persie, con quien tenemos muy buena relación y no tiene problemas con venir, me dijo que le avisara con tiempo y venía. El resto es hacer un partido entre ex Católica contra ex seleccionados chilenos. Gorosito, Beto Acosta, Lunari, Mario Lepe, Darío Conca y otros que se me olvidan por Católica. Por la Selección, Marcelo Salas, David Pizarro, Gary, Alexis, hacer algo bien lindo porque creo que me merezco una despedida en San Carlos donde hice toda mi formación. Creo que la gente me va a acompañar y vamos a tener un estadio lleno.