Chile no juega el Mundial, pero hay que algunos que se resisten a olvidarlo. Los hinchas de Argentina y Perú, por ejemplo, han realizado distintas manifestaciones de burla por la ausencia de la Roja. Más serio es el alemán Joshua Kimmich, quien recordó las dificultades que el campeón del mundo tuvo para vencer al bicampeón de América en la final de la Copa Confederaciones.
"Fue un partido duro. Chile tenía un equipo con muchos jugadores más viejos. Se conocían entre ellos hace mucho tiempo, jugaron diez años juntos y nosotros éramos completamente opuestos: jóvenes y que no nos conocíamos tan bien, por lo que no fue sencillo. Chile era mucho mejor que nosotros, pero intentamos dar pelea y anotamos con mucha fortuna", declaró el volante del Bayern Múnich en la conferencia de prensa que ofreció hoy, previo al debut germano ante México.
También recordó los enfrentamientos con Arturo Vidal en ese partido. "Estábamos 1-0 y las emociones afloraron. Arturo y yo estábamos luchando por nuestros países y en ese momento ya no éramos compañeros del Bayern. Pero la Copa de las Confederaciones se quedó en Alemania y todo bien. Todo está OK entre nosotros".
Naturalmente, a Kimmich lo motiva otro objetivo: el bicampeonato mundial. "Es muy complicado ganar dos Copas del Mundo seguidas, pero creemos que podemos hacerlo bien de nuevo. Lo del año pasado nos ayudó mucho: para la gente la Copa de las Confederaciones no fue tan importante, pero al final todos nos vieron y les gustó el equipo, sobre todo el hecho de que somos jóvenes, pero preparados para luchar", sentenció.