Kudelka y las bajas: "Me levanté de la siesta y tenía dos jugadores menos... Perdimos calidad y cantidad"

Frank Kudelka dice que quiere dar vuelta la página, que confía en el plantel que tiene y que lo más importante ahora es enfocarse en los objetivos venideros. Pero no puede desligarse de una última semana compleja, con la abultada derrota ante Antofagasta y las salidas de Mauricio Pinilla y Ángelo Araos incluida.

No hay dobles lecturas para el DT. La salidas "mermaron al plantel en calidad y cantidad" de jugadores. "La última semana fue anómala, es verdad, pero como dije, no me voy a excusar en que se fueron dos jugadores antes del partido. Que no me excuse no quiere decir que me guste. Yo mismo despedí a Mauricio en el hotel. No tengo ni voz ni voto ahí. No sé qué pasó después", aseguró. "Estamos en un momento de una transición que no viene con mi llegada, si no de antes. En la que se debe y seguramente la institución tendrá un plan para corregir todo esto, si no, seguiremos pasando por acá distintos nombres. Estoy enfocado en esa transición", añadió.

"No sé si voy a recibir los frutos de esa transición, porque esto va de la mano del resultadismo. Y hay veces que eso pasa por arriba de cualquier acto racional. Estoy trabajando para que esto se mejore. Si después eso no se soporta con resultados, es donde la emocionalidad irá por sobre la racionalidad. Estamos en un tiempo de transición, pero en el fútbol no hay espera. Hay que ganar o si no no sirve. No sé si me va a alcanzar", expresó también, dejando en claro que no sabe hasta dónde puede proyectarse en la institución. "Todo lo que hago es en pos de un beneficio institucional. A veces alcanza en el corto plazo y otras veces no. Espero recibir esos frutos. Pero si no, habré hecho el punto de partida", explicitó.

"No estoy arrepentido de haber venido. Han ocurrido cosas que a uno no le gusta pasar. Uno se plantea, pero lo que pasa es que es un inicio. Me quiero dar la posibilidad, mientras me alcance, de ser una persona que aporte una idea para cambiar todo esto", remarcó.

En tanto, expresó que se quedó "con las ganas" de dirigir a Pinilla y que todos los hechos se sucedieron muy rápido. "No suelo excusarme. Pero lo que pasó es anómalo y difícil de sobrellevar. Me levanté de la siesta y tenía dos jugadores menos. Dicho así parece acusatorio. No cabe duda que repercutió en el plantel. Los fundamentos que  me dieron son sólidos, aunque no me gusten", declaró este viernes en conferencia de prensa. "Y en cuanto a Mauricio… Me quedé con las ganas de seguir dirigiéndolo, pero con la cabeza puesta a fondo aquí. Con estas situaciones, evidentemente no lo estaba. Pero yo no soy nadie para cuestionarlo. Le salió esto y me lo dijo… ¿Qué puedo hacer?", subrayó.

Además, aseguró que muy probablemente, a raíz de las salidas que se han producido, sea más complejo plasmar su idea de juego. "Se han ido tres jugadores muy importantes en su calidad. Desde el punto de vista de sostener la idea, creo que se puede. Tal vez lleve más tiempo. En relación a lo anímico, vuelvo a repetir… Es notorio. Lo digo con realidad. Quienes esperan momentos mágicos y momentos de saltar una cancha y ver a un equipo que se lleve por delante a todos, no va a ser en el corto plazo", expresó con honestidad.

Finalmente, clamó por refuerzos y dijo que "evidentemente hace falta un mediocentro y un delantero", aunque aclaró que tiene "plena fe en el plantel" actual. "¿Ángelo Henríquez y Gonzalo Espinoza? Si vienen, nos pueden ayudar mucho. No hay un abanico de grandes posibilidades. No tenemos muchas opciones. Ante esa situación, son dos buenos nombres. Nos pueden dar lo que nos está faltando. Pero no sé cómo están las negociaciones ni si va a ocurrir o no va a ocurrir que lleguen al plantel", cerró.