Frank Kudelka lo sigue intentando. Hasta ahora la Universidad de Chile no camina bajo su conducción y, por lo mismo, el DT hará modificaciones en el equipo titular que saldrá a la cancha del estadio Nacional, este sábado, para medirse ante el sorprendente elenco de Unión La Calera, que se mantiene en un expectante cuarto lugar, peleando con buenos argumentos por la punta del campeonato.
La derrota de la semana pasada ante la Universidad de Concepción caló hondo al interior del plantel universitario. Por aquella misma razón, el entrenador dispuso el reordenamiento de sus piezas, buscando elevar el paupérrimo rendimiento que exhibieron los suyos en el compromiso en el que sucumbieron ante el Campanil.
Atrás quedará el 3-4-1-2 que, a la larga, no fue la solución para corregir los problemas del equipo y, ante los cementeros, el entrenador argentino dispondrá otra vez de un esquema de 4-2-1-3. Además, marginó de la estelaridad a Felipe Seymour y Gonzalo Espinoza, que han jugado muy por debajo de lo que se espera de ellos, y han sido incapaces de cargar con el peso futbolístico de la escuadra. Así, Rafael Caroca y Yerko Leiva ingresarán en sus respectivos lugares, con la intención de que refresquen la zona media y sepan generar el fútbol extraviado por el actual plantel laico.
De esta manera, el equipo que se medirá ante los de la Quinta Región interior este sábado a partir de las 15.30 horas será con Johnny Herrera en el arco; Rodrigo Echeverría, Christian Vilches, Rafael Vaz y Matías Rodríguez en la última línea; Rafael Caroca, Yerko Leiva y David Pizarro en la mitad de la cancha; dejando a Francisco Arancibia, Ángelo Henríquez y Yeferson Soteldo en ataque.
La otra novedad, será el regreso de Gustavo Lorenzetti a la lista de citados. El Duende, eso sí, estará en el banco de los suplentes.
Los laicos marchan en el quinto lugar de la tabla, pero apenas con 38 puntos, diez unidades por debajo de la Universidad Católica por lo que, incluso matemáticamente, a falta de siete jornadas para el final de la competencia, sus opciones de disputar el título son, al menos, exiguas.