Frank Kudelka sigue buscando el funcionamiento ideal para Universidad de Chile. Después de la estrecha victoria sobre La Calera, el técnico azul anuncia, por ejemplo, que mantendrá la línea de cuatro hombres en la defensa, pero reconoce que sigue buscando una mejor forma colectiva. Y, en ese contexto, es categórico: "Todos tenemos que ver a institución como una oportunidad de ser los mejores. No se puede transitar más por momentos de individualismo. Tenemos que alinearnos todos".

Sin embargo, hay una individualidad que lo seduce particularmente. Y de la que exige su permanencia en el club: el venezolano Yeferson Soteldo. "Estoy contento con él. Lo dije en su momento, hay que ayudarlo, tratar de educarlo. Es un chico joven que vive cosas de grandes. Estamos acostumbrados a que se fastidie. Cuando no se fastidia le pregunto por qué no se fastidió. Para mi es un desafío como persona y jugador. Meterle en su cabecita que puede hacer cosas mucho mejor", lo describe, con evidente aprecio. Y luego pasa al encargo directo a la dirigencia de Azul Azul.  "Hoy me siento muy bien con Soteldo. Es como mi hijo... Si logramos hacerlo entender, tiene un futuro enorme. Tiene que volver a su club y empezar una negociación. Me gustaría tenerlo más tiempo. Quiero estar lo mas cercano posible porque sé que hay un impedimento por eso verde (el dinero, los dólares)", explica.

Kudelka también analiza el caso de otra, a la que no tiene en mente para su proyecto futuro: Gonzalo Jara. "Jara para mí es un jugador cuya prestación técnica es extraordinaria, lee partidos muy bien. Y eso va más allá de lo ponga o no lo ponga. Hay momentos en la vida de la que persona que no se puede separar a la persona con el futbolista. Gonzalo entrena muy bien. Es irreprochable, pero están las situaciones de los ciclos y es ahí donde las personas se tienen que poner de acuerdo. Ha dicho públicamente que se quiere quedar. Ante la posibilidad de un jugador de su envergadura, tiene que ir de la mano con las expectativas de la institución. Mi idea es armar un equipo con la idea de la institución por arriba de nosotros. Y lo digo para todo, no solo por Jara".

En ese marco, el entrenador refuerza una idea. "Es bienvenido que los jugadores se quieran quedar. Me llena de gratificación. Pero acá hay una cuestión de evaluación, en la que yo estoy involucrado. Tenemos que tener lineamientos claros", explica.

La evaluación de la que habla, dice Kudelka, también toca al proceso que encabeza. "Me quiero quedar a cumplir mi cargo para defender mi idea de trabajo. Me gustaría quedarme mucho tiempo. No me quiero ir. Quiero que este momento de idas y vueltas desde que llegué sean enseñanzas futuras. Estoy convencido de eso... La U es una institución grande en Sudamérica, muy respetada. Pero se debe animar a ser más grande", afirma.

El entrenador es cauto al hablar del futuro de David Pizarro. "Uno es respetuoso con las decisiones ajenas. David es esa clase de jugadores que entiende cómo jugar, cómo entrenar, qué se debe hacer y qué no se debe hacer. Son esas personas que uno no quiere que se vayan nunca. Es ejemplo para todos. No puedo soslayar lo que él piensa de su carrera", establece.

Y también trata de explicar el rendimiento de Ángelo Henríquez, quien sigue sin transformarse en el goleador que la U requiere. "Ángelo parece una excusa pero es un jugador que no ha tenido algo tan importante que es la pretemporada. Hace rato no la tiene. Tenemos variantes en la ofensiva, pero bajo ningún punto echamos por tierra lo que pensamos de lo que Ángelo nos puede dar. Tiene muchos movimientos, mucha táctica. Hoy la situación de gol para él es un plato de comida, y por ahí no se siente tan cómodo porque ha tenido opciones y no las puede concretar", enfatiza.

Kudelka también aborda el lío por la localía de Palestino en La Cisterna y la negativa del alcalde Santiago Rebolledo para recibir a los azules en la comuna. "Se jugará donde deba ser e iremos por el triunfo. No sé los motivos de algún cambio y me extraña porque no es lo común en organización del fútbol chileno", sentencia.