En el deporte chileno no sobran los que han alcanzado la cúspide en alguna disciplina. Por lo mismo, lo hecho por Valentina Toro (17) es más que destacable. El 29 de agosto pasado, la Federación Mundial de Karate la ratificó como la nueva número uno del mundo en la categoría 16-17 años, menos de 59 kilos. Esto, tras ganar su cuarto torneo panamericano, en Buenos Aires.

Su inspiración para ser la mejor le llega de las figuras de acción femeninas del cine, su gran pasión. "Siempre las he amado, desde chica, son mis ídolas. Kill Bill y Resident Evil me encantaban", le contaba a La Tercera, mientras competía en un torneo nacional que ganó en las dos categorías que compitió: adulto y juvenil. con confianza.

A los 13 años empezó a mostrar sus pergaminos ganando su primer panamericano. Dos años después, en 2015, el mundo entero de las artes marciales la empezó a conocer, cuando compitió en su primer Mundial. Salió quinta, actuación que no pudo mejorar en Tenerife, España, donde se realizó la cita planetaria este año. Fue eliminada en la tercera ronda.

Pese al traspié, sus logros proyectan a la Pequeña Saltamontes como una deportista que puede colgarse una medalla olímpica en un futuro no tan lejano. Ella lo sabe: "Me duele la guata de sólo pensarlo". Pero no se asusta.

De hecho, quiere estar en Tokio 2020, aunque es difícil que clasifique, pues no puede participar de los torneos eliminatorios por ser menor de edad (cumple 18 en febrero). "Si no se puede clasificar, será para 2024. Voy a ir a buscar medallas", anticipa con una confianza que asombra. Es la actitud de la promesa del karate nacional.