La selección chilena ya suma 86 días sin técnico, luego de la salida de Juan Antonio Pizzi el 10 de octubre de 2017, tras quedar fuera de la clasificación al Mundial de Rusia. Sin embargo, la espera terminará pronto, ya que faltan muy pocos detalles para que la ANFP anuncie oficialmente al colombiano Reinaldo Rueda como próximo entrenador de la Roja. En un principio, el contrato será hasta el final de las Eliminatorias para Qatar 2022, pero se renovará automáticamente hasta la Copa del Mundo si Chile logra clasificar a la cita.
Eso sí, la relación puede terminarse antes, precisamente, después de la Copa América de Brasil 2019, el primer apretón fuerte del nuevo DT. Además de clasificar al próximo certamen planetario, otro de los objetivos que tendrá el adiestrador cafetero será realizar un buen torneo continental el año siguiente. El ideal del organismo de Quilín es conseguir el tricampeonato, pero considerando que se trata de un nuevo proceso y que exigir el título es exagerado, la meta mínima es terminar entre los cuatro mejores. No superar la fase de grupos o quedar en el camino en los cuartos de final hoy no está en los planes.
El problema es que la Copa América de Brasil marcará el debut de Rueda como seleccionador en competencia por los puntos, ya que durante todo el 2018 y los primeros meses de 2019 la Roja sólo jugará partidos amistosos (ver nota secundaria). Por lo mismo, el sello del cafetero recién se podrá apreciar realmente un año y medio después de su llegada, y justo antes del inicio de las Eliminatorias para 2022.
En la ANFP quisieron tomar resguardos e incluyeron en el contrato de Rueda una cláusula de revisión para después de la Copa América 2019, con el fin de evaluar el trabajo del ex DT de Colombia, Honduras y Ecuador. En otras palabras, si al técnico le va mal en el país de la samba el organismo que preside Arturo Salah podría cortar anticipadamente la relación.
Al comienzo de las negociaciones, Rueda no aceptó la inclusión de dicha cláusula. Sin embargo, cuando la federación subió la puntería económica este lunes 1 de enero, lo hizo manteniendo dicho ítem del vínculo. A diferencia de lo que ocurrió la primera vez, ayer el técnico aceptó aquella cláusula, confirman en la asociación.
Este era uno de los pequeños detalles que aún faltaban para anunciar oficialmente al estratega como nuevo seleccionador. Durante la mañana y la tarde de ayer, el directorio de Quilín estuvo trabajando con los representantes del DT (el colombiano Ramy Abbas y el chileno Carlos Vera), afinando el contrato. Si bien el técnico ya dio el sí al aceptar ser evaluado luego de la Copa América de Brasil, uno de los aspectos que faltan es determinar cuál será la cifra de la indemnización si es que la ANFP, por ejemplo, decidiera interrumpir el proceso anticipadamente.
Desde el ente rector del fútbol chileno admiten que el contrato final se está afinando y que dentro de los próximos días el acuerdo tiene que estar celebrado. Entre ambas partes ya hay un consenso económico total. El todavía técnico del Flamengo ganará líquido US$ 3,25 millones al año como DT del bicampeón de América. Y para que se concrete su llegada desde Río de Janeiro, la federación nacional le pagará al equipo carioca los US$ 325 mil que cuesta su cláusula de salida. Este fue uno de los elementos que entrampó las negociaciones durante la semana pasada, ya que en Quilín querían que el propio estratega se hiciera cargo de la rescisión.
Desde el entorno del técnico como también desde la federación chilena señalan que Rei llegará a Chile la próxima semana para firmar el vínculo y ser presentado en la sede de Quilín. Eso sí, el anuncio oficial puede realizarse en cualquier momento durante las próximas horas, apenas se arreglen los detalles faltantes y la ANFP pague la cláusula de salida a Flamengo.