Los últimos días del 2017 fueron de inquietud para la ANFP. Cuando parecía que el acuerdo con Reinaldo Rueda sería un trámite, por el gran interés de ambas partes en trabajar juntos, todo se complicó. ¿El motivo? Diferencias económicas importantes. Mientras en Quilín le ofrecían US$ 2 millones por año, el técnico exigía al menos US$ 3,5 millones para dirigir a la Roja. El consenso estaba lejos.

Sin embargo, ayer la federación chilena subió la puntería y le realizó una nueva oferta al exitoso entrenador colombiano, según señalaron en Quilín. Se trata de una propuesta mejor que la anterior y que se acercó bastante a las pretensiones económicas del actual DT del Flamengo, club que le paga US$ 3 millones anuales.

Este lunes 1 de enero era un día clave y lo sabían en el ente rector. Rueda empezaría a escuchar a otras selecciones, como la uruguaya, por ejemplo, si el ente rector no le hacía una oferta acorde a su currículum y su palmarés. Por lo mismo, en el ente rector retomaron el contacto con el campeón de la Copa Libertadores 2016, con el que llevaban varios días sin comunicarse tras las fallidas tratativas.

El organismo presidido por Arturo Salah mejoró su propuesta en términos salariales como también en otros aspectos. Por ejemplo, ahora está dispuesto a pagar la cláusula de salida que el adiestrador tiene en Flamengo, club donde termina contrato a fin de año. El monto de la rescisión asciende a US$ 325 mil. En primera instancia, la ANFP quería que el propio DT solventara esa cantidad, lo que fue rechazado por el técnico, el que incluso se molestó por tal petición.

Si bien aún quedan detalles que afinar, ambas partes lograron un acercamiento económico importante durante estas primeras horas del 2018, por lo que Rueda está cerca de convertirse en el nuevo técnico de la selección chilena.