La búsqueda de un defensor que reemplace a Julio Barroso es uno de los principales objetivos del técnico Gustavo Quinteros y de la dirigencia de Colo Colo. El DT había pedido la continuidad del Almirante, pero la dirigencia se la negó, argumentando una “política de rejuvenecimiento” del plantel, por lo que al argentino-boliviano no le quedó más que aceptar, aunque dejó patente su incomodidad por esa situación, ya que contaba con el emblemático jugador.

Fue así como apareció la figura de Branco Ampuero. El defensa de Antofagasta había llegado a un acuerdo con Colo Colo. Sin embargo, restaba la aprobación de la Comisión Fútbol, que ayer se reunió pero que trasladó todas las decisiones para el directorio de hoy, para que todo lo que se resuelva quede registrado en un acta.

La situación complicó al zaguero y fue ahí donde apareció Universidad Católica, que compró el 50% del pase, vinculando al jugador por los próximos tres años.

Al interior del cuerpo técnico albo, hay molestia por la burocracia interna del club para resolver los fichajes. “Ampuero estaba en los planes y es una pena que se vaya a Católica. Habrá que ver cómo se soluciona”, afirman desde el Monumental, ratificando la caída de uno de los fichajes solicitados por Quinteros, quien no pierde las esperanzas de que se reconsidere lo de Barroso, mientras espera al directorio de esta tarde para ver si cuenta con Miiko Albornoz y Martín Rodríguez como nuevas contrataciones.