Los que vieron el primer tiempo entre La Calera y Antofagasta, pudieron creer que la visita era la que luchaba por amagarle el tri a la Católica.

Pero los de Héctor Tapia sólo buscan un puesto en la Libertadores y los cementeros volvieron a mostrar la irregularidad de sus últimos tres encuentros.

Entonces, vino el entretiempo y el café cargado de Juan Pablo Vojvoda. Fue así como los locales se fueron en busca del arco defendido por Ignacio González y Andrés Vilches lo ratificó en cancha con un cabezazo desviado a los cinco minutos del complemento.

Y ese fue el impulso que necesitaban los rojos, pues tras dos ocasiones claras, Juan Leiva infló las redes y los devolvió a la cita con la historia.

Encuentro que fue ratificado cinco minutos después, cuando Alexis Martín le tapó un penal a Jason Flores y mantuvo la ventaja en el marcador.

Pero los anfitriones no supieron mantener la presión en el campo rival y si bien ingresó Felipe Seymour, quien cumple bien esas labores, cada vez se echaron más atrás.

Y eso en el fútbol es peligroso, pues en cualquier momento pierdes la ventaja mínima y todo se derrumba. Eso fue lo que pasó a los 76′, cuando Bello remató sólo en el área chica e hizo saltar a antofagastinos y cruzados.

El resto del juego fue más una búsqueda desesperada, reclamos por penales no cobrados y ese derrumbe sicológico que nunca le permitió a la escuadra de la quint región alcanzar la punta.

Por lo mismo en San Carlos celebran, empatando el miércoles ante La Calera (21:30 horas), dan su tercera vuelta consecutiva.