La Calera vs. Liga de Quito: un debut histórico, en medio de turbias sospechas de suplantación

Son días de alta tensión en Unión La Calera, tanto dentro como fuera de la cancha. Por un lado, el peso de una grave acusación de suplantación de identidad que recae sobre el club, sus dirigentes y el arquero Alexis Martín; por otro, el histórico debut en la Copa Libertadores de América, que está a la vuelta de la esquina, ante Liga Deportiva Universitaria, este miércoles, en el estadio Nicolás Chahuán.

Dos frentes totalmente opuestos que conviven en el día a día de los cementeros. Uno de ellos avergüenza y el otro enorgullece a sus hinchas. Uno se juega en los tribunales de justicia y el otro en el campo, donde en 2020 la institución consiguió logros muy importantes.

De hecho, el equipo de la Región de Valparaíso es el actual subcampeón del fútbol chileno, por lo cual participará por primera vez en el torneo de clubes más importante y prestigioso del continente. Un derecho que se ganó tras la excelente campaña realizada la temporada pasada, en la que peleó el título hasta la penúltima fecha con Universidad Católica, elenco que finalmente se coronó tricampeón.

Eso sí, La Calera tuvo escasa suerte en el sorteo y quedó ubicada en el grupo G de la Copa, el de la muerte, junto al Flamengo de Mauricio Isla; Vélez Sarsfield de Pablo Galdames y Liga de Quito, conjunto frente al que debuta este miércoles, a las 22 horas.

Será un duro estreno para los caleranos. LDU es uno de los clubes más poderosos y ganadores de Ecuador, campeón de la Libertadores en 2008 y dirigido por el uruguayo Pablo Repetto, extécnico de Independiente del Valle y el único que ha eliminado a River y Boca, en sus respectivas canchas, en un mismo certamen. Una buena vara para saber qué tan lejos puede llegar el cuadro chileno en esta edición.

La Calera marcha invicta en el Torneo Nacional, con ocho puntos en cuatro fechas, bajo la conducción de su nuevo entrenador, el argentino Luca Marcogiuseppe, quien reemplazó al también transandino Juan Pablo Vojvoda, quien no quiso renovar en el club.

Al menos este miércoles, los cementeros serán noticia por su histórico estreno en el certamen internacional y no por la grave acusación de suplantación de identidad que pesa sobre ellos, especialmente, sobre su gerente Martín Iribarne y el meta Alexis Martín Arias.

El caso lo lleva la fiscalía de Viña del Mar, por el cual ya se formalizó al argentino Nicolás Ambrosio, amigo de Iribarne y acusado de hacerse pasar por el arquero, con el objetivo de tomarse un PCR que diera negativo, en momentos en que el jugador estaba infectado de Covid-19, para que este pudiera jugar en el campeonato local y en la Copa Sudamericana.

Ambrosio quedó con arraigo nacional y se decretaron 90 días para la investigación. Según Lionel González, abogado persecutor, dos enfermeras del laboratorio Etcheverry le advirtieron al dueño del establecimiento que la persona que decía ser Alexis Martín en realidad no lo era. Posteriormente, el propietario emplazó a Iribarne, quien le reconoció que la persona en cuestión era Ambrosio y no el arquero, según la acusación del fiscal.

Son días de luces y sombras para Unión La Calera, el exclub de Sergio Jadue. Los cementeros brillan dentro de la cancha, pero fuera de ella solo suman problemas. Y muy graves.