Luis Jiménez se subió a la máquina del tiempo para viajar 16 años atrás. En las mismas canchas de La Cisterna que lo formaron como futbolista, y que lo hicieron emigrar cuando tenía apenas 18 años a la Ternana, el futbolista de 34 años gritó el gol más importante de su carrera. No fue con la camiseta del Inter de Milán, o la del Manchester City, elencos que defendió hace un par de años, sino con la de sus amores: Palestino. Ese mismo equipo al que decidió volver para quedar en la historia.
Es que el Mago, por un momento, jugó como un canterano que busca la gloria y el reconocimiento. Pedía el balón, se desmarcaba y alentaba a sus compañeros a seguir luchando. A los 54' llegó la jugada que, seguramente, recordará por muchos años. Tomó el balón en su propio campo, levantó la cabeza e inicio una carrera decidida hacia la gloria que duró casi 81 metros. En el camino eludió a Fabián Torres, quien no pudo hacer nada frente al regate del volante. La obra maestra la finiquitó con un derechazo imposible para el portero Joaquín Muñoz, que solo atinó a mover las manos. Su grito se escuchó en cada rincón del estadio de La Cisterna, que no paraba de corear su nombre durante largos minutos, y que se multiplicaron cuando fue reemplazado, a los 80'.
Apenas finalizó el duelo, Jiménez recibió el abrazo de Ivo Basay. Sus compañeros no se cansaron de ovacionarlo: "Que de la mano, deLuis Jiménez, todos la vuelta vamos a dar", cantaban, mientras el futbolista agradecía con su hijo en brazos.
Visiblemente emocionado, el Mago reveló su alegría por el título obtenido por el Tino, a 40 años del último campeonato nacional conseguido. "Es un retorno soñado. No conté los metros, no sé cuánto corrí. ¿114 kilómetros por hora el remate? No sé quién pateó conmigo. Dios yo creo que me ayudó", dijo el futbolista antes de subir a buscar la medalla de campeón.
Roberto Gutiérrez, otra de las figuras del elenco de Basay, valoró quedar en la historia del club árabe: "Son muy pocos los jugadores que quedan en la historia de este club por títulos y es un privilegio que nos pase a nosotros" , comentó.
Finalmente, el portero Sebastián Pérez hizo un llamado a la calma: "Celebrar será hoy, pero sabemos que desde el lunes tenemos que ponernos las pilas para dejar a este equipo en primera división".