La Católica perdonó a Unión Española
La UC fue una farra ante los rojos y dejó pasar la oportunidad de cerrar la primera rueda con seis puntos de ventaja sobre Colo Colo en el liderato del torneo.
U. Católica 0-0 U. Española
UC: C. Toselli; R. Rebolledo, G. Lanaro, B. Kuscevic, J. Cornejo; C. Fuentes (67', C. Lobos), L. Aued, D. Buonanotte (81', C. Munder); D. Valencia, D. Riascos (81', S. Sáez), C. Pinares. DT: G. Quinteros.
UE: D. Sánchez; J. P. Gómez, E. Palomeque, J. M. Aja, M. Larenas; R. González, L. Pavez, F. Seymour, M. Dávila (72', Y. Mejía); M. Caballero, S. Varas (51', J. L. Sierra) (90+2', B. Yáñez). DT: J. P. Toro.
Árbitro: E. Gamboa. Amonestó a Kuscevic, Valencia (UC); Pavez C., Aja, Larenas, Sánchez, González, Seymour (UE).
Estadio San Carlos de Apoquindo. Asistieron 7.714 personas.
En cursivas, jugadores juveniles.
Cuánto hubiese cambiado el partido del martes entre Universidad Católica y Unión Española si César Pinares metía ese tiro libre a los 12', si Diego Buonanotte afinaba un poco la puntería en la jugada siguiente o si Diego Valencia hubiera conectado bien ese centro a los 32'. Pero no, los cruzados le perdonaron la vida a Unión Española y terminaron empatando sin goles en el cierre de ambos de la primera rueda del torneo chileno.
La UC se pudo ir al receso con seis puntos de ventaja sobre Colo Colo, su más cercano perseguidor y sacándole diez a los hispanos, pero lo hará con cuatro sobre el Cacique y siete del elenco de colonia, distancia igualmente cómoda para enfrentar la segunda rueda.
El cuadro cruzado dominó de principio a fin el partido. Con toques rápidos y al pie. Con transiciones veloces, pero con serios problemas en la definición. Pinares y Aued fueron los estandartes del dueño de casa en la primera fracción.
Justamente fue en esa etapa cuando ocurrió el despilfarro de los de la precordillera. Pinares de tiro libre, Valencia en dos oportunidades y Buonanote también dos veces pudieron torcer el destino de Católica, pero, o les faltó precisión o se quedaron cortos en sus intentos. Al propio Valencia le anularían correctamente un gol apenas iniciado el segundo tiempo, por posición de adelanto.
Los rojos, que no contaron con un suspendido Fernando Díaz como DT, fueron un equipo opaco. Demasiado falto de ideas. La diferencia entre uno y otro equipo fue evidente. Unión solo se dedicó a defender y que de no ser por un cabezazo de Palomeque casi ni se asomó por el arco que anoche defendió Toselli ante la lesión de Dituro.
La UC, que por generación de oportunidades no extrañó ni a Fuenzalida ni Puch (aunque sí extrañó sus goles y frialdad para tomar decisiones acertadas en momentos límites), parecía necesitar armar desde un poco más atrás. Fuentes solo rompía y no provocaba sorpresa cuando recuperaba la pelota. Y arriba faltaba punción. Y quizás eso entendió Quinteros, que mandó a la cancha a Lobos, Munder y Sáez, que tuvo una muy clara ahoga por el Mono Sánchez.
Sin embargo, el resultado no cambió y la UC terminó dilapidando la oportunidad de cerrar con un broche de oro su excelente primera rueda en el torneo chileno, donde mira con holgura a todos hacia abajo. Al final del torneo se sabrá si extrañará los dos puntos desperdiciados ante Unión.
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