De seguro, esta edición de la Liga de Campeones será recordada por mucho tiempo. Un torneo que ha tenido una dosis exagerada de emociones y de épica, en donde la intensidad se da hasta el minuto final. La última muestra de aquello fue la agónica clasificación del Tottenham, tras vencer 2-3 al Ajax, en Holanda, luego de ir perdiendo 2-0. Otro ejemplo de las numerosas remontadas que ha dado la presente Champions, demostrando que es el torneo de clubes más importante del mundo.

En octavos de final, fue el Ajax el que realizó una hazaña, nada menos que en el Santiago Bernabéu. En la ida, jugada en Ámsterdam, cayeron 1-2 con los merengues. Pero en la vuelta, los holandeses brindaron una exhibición y golearon 1-4, para pasar de fase y sentenciar la era de Santiago Solari.

El Atlético de Madrid tenía toda la motivación de llegar a la final porque es en su estadio, el Wanda Metropolitano. Dio un paso al vencer 2-0 a la Juventus como local. Pero en la revancha, jugada en Turín, la Vecchia Signora remontó gracias a una actuación consular de Cristiano Ronaldo. El goleador histórico de la Champions fue el artífice de la victoria con un triplete.

Una de las llaves más atractivas de octavos fue Manchester United-PSG. Los parisinos, que formaron un plantel para ganar la Orejona, ganaron 0-2 en Old Trafford. Pese a ir abajo en la serie, y enfrentar la revancha con bajas, los Diablos Rojos dieron el golpe. Con un penal convertido por Marcus Rashford, en el cuarto minuto de adición, igualaron la serie en un global de 3-3. Pasaron por los goles de visita.

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Foto: EFE.[/caption]

En Italia, la Roma le ganó al Porto por 2-1. Los capitalinos, semifinalistas de la edición pasada, fueron a Portugal con la misión de aguantar la diferencia. El Porto igualó el marcador y el partido se fue al tiempo suplementario. En el minuto 117', Alex Telles le dio la clasificación a los lusos, para enfrentarse en cuartos con el Liverpool.

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Foto: Reuters.[/caption]

En la ronda de los ocho mejores, el Ajax de Erik ten Hag dio otra muestra de grandeza al bajar a la Juve. En la ida, jugada en su estadio, igualaron 1-1. En la vuelta, le ganaron al multicampeón italiano 1-2 en Turín, sorprendiendo a todos.

Eso no fue todo. El Tottenham, que le había ganado al Manchester City en Londres, clasificó en el Etihad Stadium, la casa de los Citizens. Con tanto dramatismo como su victoria en Holanda, los londinenses avanzaron pese a caer 4-3. Fernando Llorente fue clave.

Las semifinales brindaron un par de definiciones impresionantes, dignas del mejor torneo de clubes del planeta. Es cosa de preguntarle al Barcelona, que desperdició una ventaja de tres goles sobre el Liverpool. En rigor, el mérito fue de los Reds, que anotaron cuatro goles y tuvieron una actuación formidable sin dos piezas fundamentales: Salah y Firmino.

El 1 de junio, en Madrid, será la final entre dos ingleses. ¿Alguien quiere que se termine la Champions?