Lo que hizo Joaquín Niemann ayer fue histórico. Su grandeza va mucho más allá del golf, alcanza a todo el deporte. Joaco va a marcar un hito en Chile. Va a ser igual o mejor que Marcelo Ríos. Definitivamente va a estar entre los cinco mejores del mundo.
Joaquín ha roto todos los esquemas y parámetros del golf chileno. Ya hoy se le compara con los mejores del mundo. Es el jugador más joven en los últimos años en ganar en el PGA Tour. Es un talento de los nace una vez cada 90 años. Queda Niemann para rato.
Joaquín volverá a ganar este mismo año. Cuando está suelto, es muy peligroso. Y buen pateador, pese a lo que dice alguna gente. Quedó demostrado en los últimos hoyos. Joaquín está cien por ciento enfocado. El de arriba lo ha cuidado.
Joaquín va a traer ojos al golf de Sudámerica. Entiende bien el movimiento de la pelota. Tiene un futuro que ni siquiera ha empezado a escarbar. Ni él ni nadie sabe hasta dónde puede llegar. Es lo mejor que le ha pasado al golf nacional. Es de otro planeta, un jugador de golf de verdad.
Y no es casualidad. Está tocado por la varita mágica del golf, está claro. Pero salir y ganar y lo ha hecho con trabajo, dedicación y ganas. Es un gran ejemplo. Ha perseguido sueños y eso le ha traído premios. Ojalá lo elijan para la Presidents Cup. Para los Juegos Olímpicos, ya no puede estar más seguro. Ojalá logre una medalla. Niemann ha llegado para quedarse.
