No ha sido una buena semana para Boca Juniors. Ni siquiera el retorno de Marcos Rojo, después de una rotura de ligamentos que lo tuvo 231 días alejados de las canchas, logró calmar los ánimos en el vestuario xeneize.
Ahora, la atención está puesta en lo que podría pasar este viernes con su compañero Sebastián Villa. El delantero colombiano es acusado por su expareja, Daniela Cortés, de violencia de género con “lesiones leves agravadas y amenazas coactivas”. Ese día será sentenciado por la jueza Claudia Dávalos.
El dictamen podría significar que el cafetero sea condenado a más de dos años de cárcel. Sus alcances podrían, incluso, romper la planificación que tiene el cuadro bonaerense para el duelo que tiene con Colo Colo por la Copa Libertadores, este martes, a las 20 horas, en La Bombonera.
La versión judicial
El lío comenzó el 27 de abril de 2020, al interior de la vivienda que el futbolista compartía con su pareja. Allí se produjeron los hechos que dieron origen a la investigación. Después de ocho audiencias en los tribunales de Lomas de Zamora, en Buenos Aires, en las próximas horas se conocerá el veredicto.
La joven, que acompaña a Villa desde 2018, acusa que fue golpeada y amenazada en reiteradas oportunidades por el jugador y que la violencia en su contra se incrementaba cuando el acusado ingería bebidas alcohólicas.
De hecho, el día mencionado, según la versión que entrega el fiscal Sergio Anauati, “se acreditaron golpes de puño en la frente de la víctima con un anillo que usa el imputado”. Además, Villa habría amenazado de muerte a la mujer y a toda su familia.
“Después que él se fue, hablé con mis padres y ahí es que decido hacer la denuncia pública, porque temía por mi familia y por mi hija. En ese momento publiqué fotos anteriores y en el texto aclaré que lo hacía porque ya no aguantaba más”, relata Cortés.
Villa se declara “inocente”
Todo lo narrado es negado por el jugador y su abogado Martín Apolo. Ambos buscan en desacreditar la versión y acusar a Cortés de extorsión. ¿Su argumento? Ese 27 de abril, Villa se habría querido ir de la casa y romper la relación. “Fue allí cuando Cortés comenzó a chantajearlo” expone el jurista.
“Soy una excelente persona, nunca le haría daño a Daniela. Soy un buen hijo, un buen hermano. Creo en Dios. Espero que todo salga bien. Soy inocente”, expresa el acusado en la audiencia final que se realizó el lunes pasado. Se presentó vistiendo completamente de negro.
Su testimonio fue rechazado por el persecutor Anuati, quien asevera que los hechos fueron “corroborados”. “Es imprescindible que se valore en esta causa que hubo violencia en todas sus formas hacía la mujer”, estima. Además, detalla: “La víctima solo compartió estos actos de violencia con su hermana y su amiga Erika, ya que tenía miedo de lo que Villa pudiera hacerle a su familia en Colombia”.
Villa es uno de los hombres fuertes en el equipo dirigido por Jorge Almirón. Esta temporada ha jugado 1.435 minutos en las tres competencias en que participa Boca Juniors.
El colombiano deberá enfrentar, además, un nuevo juicio: la Fiscalía General de Lomas de Zamora le solicitó al juez de Garantías, Javier Maffucci, que inicie una investigación por abuso sexual contra una joven de 27 años.