Las relaciones futbolísticas entre franceses y argentinos están en un convulsionado momento. Los cánticos racistas de los sudamericanos despertaron la crítica de gran parte del mundo del fútbol.
Si bien uno de los principales apuntados fue el volante Enzo Fernández, quien fue fuertemente cuestionado por el club y sus compañeros en Chelsea, los reclamos escalaron incluso a nivel de federaciones. Situación en la que el organismo galo reclamó a la FIFA.
Claro que el tema está muy lejos de apaciguarse. Es más, en las últimas horas esa creciente enemistad firmó un nuevo capítulo, que tiene a un viejo conocido como protagonista.
Jorge Sampaoli, exseleccionador de Chile y Argentina, dio una entrevista al medio SoFoot en la que, tras una corta argumentación, trató de autistas a dos de los delanteros más importantes que tiene Francia: Ousmane Dembélé y Kylian Mbappé.
“Cuando todo se desborda, los demás jugadores son como espectadores que observan cómo terminará la acción. Saben que juega como un autista: empieza la acción y la termina solo. No tiene la capacidad de hacer brillar a un compañero, solo sabe cómo brillar él mismo. Mbappé es un poco igual”, afirmó el casildense.
Incluso, el zurdo fue un poco más allá en su crítica, tras desnudar las falencias futbolísticas de las que adolece, al menos actualmente, el equipo que dirige Didier Deschamps.
“Francia tiene una selección extraordinaria, pero necesita correr mucho y cuando los espacios se reducen no encuentra canales de ataque, a pesar de sus enormes capacidades individuales. A falta de pasadores y de juego combinado, el equipo depende enteramente de su solidez y de una buena jornada de sus jugadores ofensivos. No es mi idea del fútbol”, advirtió el exDT de la U.
Las disculpas de Sampaoli
Palabras del transandino que cayeron pesadamente en el ánimo de los galos. Sobre todo, porque Sampaoli ya dirigió en ese país cuando estuvo al mando de Olympique de Marsella, el club más popular de ese país.
En ese escenario, el adiestrador decidió disculparse a través de sus redes sociales, no tanto con los jugadores señalados, sino más bien con las personas con algún trastorno del espectro autista (TEA).
“Nunca fue mi intención referirme al autismo. Pido disculpas a cualquier persona. Quise hablar de individualidad. Más que nunca es una etapa en que hay que tener cuidado con las palabras utilizadas”, mensaje que fue escrito en portugués, español y francés.