La daga al último segundo de Stephen Curry en la victoria de los Warriors frente a los Phoenix Suns

Stephen Curry volvió a inscribir otra jornada exitosa al catálogo de sus grandes actuaciones en la NBA. El base estrella de los Golden State Warriors fue el encargado de sellar una agónica victoria 113-112 ante los Phoenix Suns, con un daga desde la línea de tres al último segundo.

Su brillante tiro le significó su sexto triunfo en los últimos siete partidos, y los de la Bahía vuelven a soñar con meterse en puestos de postemporada luego de una irregular campaña.

La temporada de los Warriors no ha sido buena, a pesar del buen nivel que ha mostrado su máxima estrella. Con episodios de violencia de Draymond Green, una baja de rendimiento de Klay Thompson y el pobre funcionamiento mostrado por el entrenador en jefe Steve Kerr, el desempeño de Stephen Curry se ha visto eclipsado y los de California se han hundido en la clasificación de la Conferencia Oeste.

Para el partido de la noche del sábado, Golden State llegaba incluso afuera de los lugares de Play In (11°). En contraparte, los Phoenix Suns asomaban en la sexta casilla.

Este choque tenía un condimento especial. Kevin Durant, ala pívot de la franquicia de Arizona, visitaba una vez más al equipo en el que estuvo tres temporadas. En los Warriors, KD obtuvo dos anillos de campeón y fue dos veces MVP de las Finales. Por esto, su reencuentro con Steph siempre es promesa de buen básquetbol.

En una apretada primera mitad, el elenco de San Francisco se fue a los vestuarios con una ventaja mínima (59-58) en la que destacaron Durant con 15 puntos y Jonathan Kuminga con 14. Curry, con 10, aún aguardaba el segundo período para desplegar su exhibición.

Justamente en la segunda fracción los papeles se invirtieron. El dorsal 30, que había estado con una baja producción, salió con ganas de destrozar a su excompañero. Con una efectividad del 53,8% en tiros de campo, el Chef anotó 20 puntos y dejó estéril los esfuerzos de un encendido Devin Booker, que terminó con 32 conversiones.

El momento crucial del partido ocurrió en el último segundo. Otra vez con Curry como protagonista. Cuando quedaban 3.3 segundo en el reloj, el cuatro veces campeón de la NBA se deshizo de la marca, recibió el balón desde la línea de tres puntos y castigó a la defensa de Phoenix con un triplazo que casi vence la bocina.

Con la espectacular anotación, el jugador de 35 años firmó el marcador definitivo de 113-112, la cuarta victoria en fila y el octavo tiro ganador de su carrera. Además, se convirtió en su segundo triple clutch más largo en términos de distancia (10 metros), por detrás del histórico lanzamiento ante Oklahoma City Thunder en 2016, que tuvo una longitud de casi doce metros. Paradójicamente, en ambas ocasiones fue contra el equipo de turno de Kevin Durant.

El día lunes, Golden State de récord 25-25, volverá a vivir un duelo clave, ya que se miden a los Utah Jazz, su más cercano perseguidor. Por otro lado, Phoenix vuelve a su casa para enfrentarse a los Sacramento Kings, también su rival más próximo en la clasificación del Salvaje Oeste.