Kamil Majchrzak (23 años) es polaco y número 94 del mundo, su mejor ranking. Fue el verdugo de Nicolás Jarry en el US Open, en el duelo que la noche del lunes vio despedirse al dos de Chile, 73º del orbe y ex 38º del escalafón.
El Príncipe ha tenido grandes logros esta temporada, incluido dos triunfos sobre jugadores top 10 y su primer título, el del ATP 250 de Bastad. Sin embargo, el rendimiento en los torneos de más nivel, es decir, ATP 500, Masters 1000 y Grand Slams ha sido pobre (ver tabla).
"Ojalá no lo estén reventando. Él puede mejorar y no está lejos de hacerlo", se apura en pedir el técnico Horacio de la Peña.
El exentrenador de Fernando González analiza el porqué de algunos malos resultados de Jarry. "Yo veo que se está presionando. Cuando no tiene presión juega como top 20 y cuando entra en situaciones álgidas baja mucho. Él tiene un potencial impresionante, pero debe encontrar un patrón que le dé tranquilidad", señala el Pulga.
"Nico tendría que haber encontrado dónde le dolía al polaco después de jugar dos horas y media, tiene que darse cuenta. Y que en algunos puntos hay que pelotear. Todo es solucionable", finaliza De la Peña.
El ex capitán nacional Patricio Cornejo también ha visto los últimos compromisos del Príncipe en el circuito. "Es lamentable que haya perdido. No ha tenido buenos resultados ante jugadores de menor ranking, lo ideal es ganar cuando se tiene que ganar y perder cuando se tiene que perder. Si uno no juega al nivel que debe jugar, ocurre lo del lunes", manifiesta Cornejo.
"Nicolás debe tener mayor regularidad y aprovechar sus ventajas, a veces comete errores, no sé lo que está pasando con él en su cabeza. Después de que se bajó Raonic (el rival original de Jarry) pensé que no tendría problemas en avanzar un poco más. Está un poco irregular, pero es joven, tiene 23 años, mucho tiempo para ir mejorando, aprendiendo, tomando más experiencia y esperar a que se estabilice", agrega Corazón de Chileno.
Cornejo analiza a la situación de Jarry, quien es dirigido por su tío Martín Rodríguez. ¿Es eso bueno o malo? El extenista responde que "no podría aventurarme en eso. No sé lo que habla con su técnico, lo que están entrenando. Martín ha tenido buenos resultados con él, pero creo que quien lo conoce mejor es su abuelo, Jaime Fillol".
Precisamente, consultado, Fillol valora positivamente la relación: "Es algo bueno. Primero hay que pensar en la persona y después en los resultados. Tener un tío que es entrenador y ha demostrado buenos resultados es un ventaja, porque no solo ayuda en su tenis, sino también en su formación como persona".
Para el abuelo del tenista, los resultados en torneos grandes, más que preocupación, le sigue causando orgullo. "Lo veo muy tranquilo, qué mejor que tener un tenista que ha estado entre los 40 del mundo, con eso es más que suficiente. Yo quisiera, igual que todo el mundo, que siguiera avanzando, pero no le veo 'rollo' ni nada sicológico", explica.
Finalmente, Fillol cree que los resultados de su nieto "son un poco el nivel que él tiene, que lo refleja el ranking. No creo que haya logrado su máximo, pero puede mejorar. Para ser top 20 tiene que mejorar cosas y lo va a ir haciendo".
"Mucho futuro"
En tanto, en Estados Unidos está Hans Gildemeister, quien también asegura que la presencia de Rodríguez como técnico es positiva. "Nico tiene mucho futuro. No sé lo que pasa en la interna, pero tiene el tenis, le ganó a Alexander Zverev (y a Stefanos Tsitsipas), ha tenido buenos rankings. Debe mejorar el físico, la parte táctica. Martín Rodríguez lo conoce de mucho tiempo, Javier Frana lo apoya, tiene un muy buen staff. El tenis hoy en día está muy competitivo, en Nueva York perdieron Thiem, Sharapova, Muguruza... Nico es muy joven aún como para preocuparse", cierra el Biónico.