A estas alturas, los atletas ya están acostumbrados a alimentarse bien, tratando de evitar el azúcar en exceso y las grasas. Es súper importante que en las semanas previas a la carrera se cuide mucho en eso. Los que competiremos en Pucón este domingo, lo tenemos asumido. En cada comida hay que consumir una importante porción de proteínas, carbohidratos, fibra y ensaladas. En el balance está la dieta.

Ahora, a pocos días de la carrera, conviene hacer una pequeña carga de carbohidratos. No excesiva, para no llegar con algo de peso extra. Sólo aumentar un poco la porción habitual, para acumular reservas energéticas hasta el día de la competencia. Obviamente, sin dejar de lado las proteínas, pero sí comenzando a evitar las fibras para que la digestión no sea tan rápida.

El día de la competencia, es importantísimo comer el desayuno habitual, el mismo que se consume previo a un entrenamiento matutino, para evitar cualquier tipo de malestar. Carbohidratos, ojalá con azúcares de fácil de digestión, como mermelada o miel, algo de proteínas (trocitos de jamón o cualquier carne blanca) y un café, ojalá sin leche. Ése será mi desayuno.

Pero hay otra comida fundamental que muchos olvidan: la de después de la carrera. Decisiva para estar bien al día siguiente. Muchos se despreocupan y piensan que pueden alimentarse de lo que quieran, pero en verdad, mientras mejor y más balanceada sea, mejor será la recuperación.