Reinaldo Rueda se gana más críticas. La liberación de Paulo Díaz y Fabián Orellana, por decisión técnica, generó un clima de tensión en la Roja, que llegó incluso hasta los clubes nacionales. Las explicaciones del colombiano no alcanzaron. Pese a que sus equipos recién jugarán el fin de semana, el DT les dio vía libre.

Sin embargo, no midió con la misma vara las necesidades de Universidad Católica y Colo Colo, que mañana disputan la fecha 24 del Torneo Nacional. Los cruzados tienen en la Roja a Alfonso Parot y César Pinares; los albos, a Óscar Opazo.

Ambos clubes ya manifestaron su descontento con la ANFP por programar una jornada crucial del campeonato al mismo tiempo que una fecha FIFA. De hecho, Juan Tagle, presidente de Cruzados, se reunió con Sebastián Moreno, timonel del fútbol chileno, para discutir por esta coincidencia. Mientras que Aníbal Mosa, titular de ByN, también hizo público su malestar. Y ahora, con la decisión del técnico, el enojo recrudeció.

El DT, con su habitual calma, se justificó: "Fabián no soporta dos partidos seguidos en menos de 72 horas, y Paulo tuvo un trauma también (...) Ojalá pudiera traer más jugadores de la liga chilena. Pero Colo Colo tiene problemas, la U tiene problemas, hay equipos con dificultades...", dijo.

La ANFP se desliga de responsabilidad. "Más allá de indagar, son decisiones propias del entrenador y lo respetamos", dijo Moreno.