La euforia de los Cóndores: "Estamos tratando de romper todas las barreras que nos pone el amateurismo"

Mucha alegría. El rugby seven de Chile consiguió un agónico e histórico triunfo en la final disputada ante Argentina en Punta del Este.

Y es que los nacionales no tan solo le ganaron a los Pumas, que jugaron con equipo titular, si no que a las condiciones adversas de la preparación.

Pasa que casi todo el equipo estudia o trabaja, además de dedicarse al deporte. Así lo graficaron varios de sus seleccionados.

"Estamos tratando de romper todas las barreras que nos pone el amateurismo", dijo Felipe Brangier, quien llegó la noche previa al debut de los Cóndores, porque debió quedarse trabajando como ingeniero comercial en Santiago.

En tanto, Francisco Urroz expuso: "Estudio medicina, voy a la facultad, al hospital, y cuando puedo se entrena". Agregó que "medirnos con equipos de esta categoría es una motivación extra, queremos estar arriba y sacrificamos muchas cosas para esto".

El capitán Brangier, en tanto, aseveró que "era un torneo que teníamos pendiente dentro de nuestro objetivos, este es un torneo redondo que vamos a recordar para siempre".