La exposición de Pablo Milad en el congreso de la FIFA tras adjudicarse el Mundial Sub 20

La Cumbre del Fútbol FIFA 2023 fue utilizada por Pablo Milad para agradecer la designación de nuestro país como sede del Mundial Sub 20 que se realizará el año 2025. El presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional expuso ante el Comité Ejecutivo del organismo rector y reveló sus emociones tras recibir la noticia.

“Es un orgullo. Todavía estoy muy emocionado por esta designación del Consejo de FIFA y para nosotros es una gran responsabilidad”, verbalizó el timonel en el evento que se realizó en Arabia Saudita.

Luego, el máximo dirigente de la actividad criolla reveló el íntimo deseo que sintió cuándo supo que la cita planetaria se realizaría en este lado del planeta y dijo que “queremos ser el centro del fútbol durante ese mes en nuestro país. Estamos muy orgullosos, contentos y agradecidos por la FIFA y el Consejo de FIFA”.

En la misma línea, Milad ahondó en la herencia que dejará la fiesta universal y señaló que “tenemos claro que el fútbol es un agente social que marca la vida de las personas. Esto será una motivación para todos los niños y jóvenes que van a ver este Mundial”. Por lo mismo, enfatizó que “el legado es emocional, es el hecho de vivir un Mundial. Lo que produce el fútbol son emociones, cambios estructurales de vida y ese es el legado de un Mundial en nuestro país. Será el quinto y, a mucho orgullo, el Gobierno, la gente y todos los clubes asociados están felices”.

Palabras que llegan en medio de la controversia que se produjo por la idea de su administración de reducir en un 50% el presupuesto del Fútbol Joven para la temporada venidera. Idea que fue rechazada de forma tajante por el Consejo de Presidentes, por que -tal como lo informó El Deportivo- se opusieron a que el nuevo formato de competencia propuesto rebajara el aporte de 4 mil millones de pesos a sólo dos mil.

De hecho, de inmediato, todos los representantes de clubes manifestaron su profunda preocupación por la propuesta, ya que iba en una dirección totalmente opuesta a las necesidades y urgencias del fútbol chileno.