La grave denuncia en que terminó la idea de llevar la Supercopa a Concepción

La disputa de la Supercopa, entre Colo Colo y Universidad de Chile, los monarcas del Campeonato Nacional y la Copa Chile, se ha transformado en un verdadero lío. De hecho, hasta ahora, aún no hay una definición concreta respecto del formato. Siguen abiertas las dos opciones: que se juegue un partido único, en campo neutral, como ha sido la tónica, o que se realicen partidos de ida y vuelta. Ahí también hay una discusión inherente, pues ambos clubes reclaman el derecho de finalizar la serie en el recinto en que habitualmente ejercen como locales.

“Pretendemos que se juegue solamente un partido, independiente de las propuestas de un partido de ida y vuelta. Queremos hacer un juego único y, de no ser así, será ida y vuelta, pero todavía no se ha resuelto porque no están las cosas sobre la mesa”, había declarado Pablo Milad, presidente de la ANFP. La idea de la final de ida y vuelta había sido lanzada por Aníbal Mosa, timonel de Colo Colo.

Para la primera opción, la búsqueda de una ciudad que albergue el encuentro y, paralelamente, la responsabilidad de recibir a las dos hinchadas más peligrosas del país, sufrió un contratiempo. Concepción, que cuenta con el estadio de mayor capacidad fuera de la región Metropolitana, ya descartó la opción.

“Efectivamente, tuvimos contacto con la ANFP, quienes preguntaron por la posibilidad de traer el partido de la Supercopa a Collao. Sin embargo, considerando los hechos de violencia ocurridos anteriormente en Concepción, no podemos exponernos nuevamente a tener peleas en nuestras calles, ni destrozos en nuestro principal recinto deportivo”, explica el alcalde penquista, Héctor Muñoz, en declaraciones que cita Diario Concepción. La municipalidad espera definiciones de Estadio Seguro en relación a otro evento que involucra a los azules: un amistoso ante River Plate.

La decisión del edil derivó en una situación tan controvertida como grave e insólita. A través de redes sociales, Muñoz recibió una amenaza de muerte, naturalmente, anónima, justamente por su determinación de no facilitar el coliseo ubicado en la avenida Collao.

Concretamente, un individuo, que ocupa lenguaje vulgar de grueso calibre, además de emoticones en el mismo sentido, advierte de la posibilidad de balear el edificio municipal y atacar a la autoridad. Se autodescribe como “El más maldito de la Candelaria”, una población ubicada en la comuna de San Pedro de la Paz.

La máxima autoridad comunal penquista optó por validar la advertencia e interpuso la respectiva denuncia ante el Ministerio Público, con el fin de que se instruya la investigación respectiva.