La historia de Colo Colo le cae encima a Maximiliano Falcón: “Está sobrevalorado, hay muchos mejores que él”

Maximiliano Falcón sigue sin aparecer en la pretemporada de Colo Colo. Peluca se declaró en rebeldía. Pretende una mejora considerable en sus condiciones económicas, más aún ahora que apareció una tentadora propuesta por sus servicios: se le vincula al Inter Miami, el equipo que luce como insignia a Lionel Messi.

En Macul, lo que inicialmente fue preocupación por una situación que inicialmente se describió como “problemas personales” fue mutando a indignación por la actitud del jugador, justo en la antesala de una temporada especialmente significativa y simbólica: los albos pretenden pelear la Copa Libertadores justo en el año del centenario institucional. En Blanco y Negro, hace rato daban por resueltas las condiciones para la extensión de su contrato.

Los hinchas están divididos entre quienes culpan a la dirigencia y valoran el aporte que el charrúa ha realizado en los cuatro años en que ha defendido la camiseta alba y quienes le empiezan a despojar de la condición de privilegio que le asignaron por sus actuaciones y, fundamentalmente, por su personalidad.

Entre los que han construido la gloria del Cacique dentro de la cancha, sin embargo, la percepción es mucho más categórica. “De verdad, es una lata lo de Maxi, porque era el jugador más querido. Que se esté yendo de esta forma me parece lamentable, independientemente de que quiera jugar con Messi. Cuando estás en el ADN del colocolino, no le puedes faltar el respeto de esta forma. A no ser que se trate de un buen negocio para Colo Colo, no se entiende. La ilusión de jugar con Messi no es suficiente para salir de Colo Colo. A lo mejor las lucas no son tantas. Es la única razón que tiene para no presentarse a los entrenamientos, de no llegar a la pretemporada. No es la forma de salir de Colo Colo después de todo el cariño que se le entregó”, establece Gabriel Mendoza, campeón de América con el Cacique en 1991.

El Coca es incluso más enfático. “Falcón no es Figueroa, no es Beckenbauer, pero se había ganado el cariño del colocolino. Es reemplazable. No es que se va y a Colo Colo se le viene la noche. Es un jugador sustituible. Falcón creció al lado de Amor. Le debe un porotito a él. No es Vidal, que si sale Colo Colo baja. Yo hablo desde el cariño, de lo que la gente le entregó. No es la forma de irse”, sentencia.

Leonel Herrera es un referente obligado en dos sentidos. Primero, porque formó parte el inolvidable Colo Colo 73, que llegó a la final de la Copa Libertadores de América, en la que cayó frente a Independiente, y luego, porque desempeñó la misma función que el uruguayo en el campo de juego. “Es molesto, porque Colo Colo está formando su equipo, asegurando jugadores claves. Que ahora salga con una propuesta lo deja mal parado. Esto debió saberse al principio. Ahora estamos en tierra derecha, con los equipos de lleno buscando a los jugadores ideales para sus planes. Así son. Siempre he dicho lo mismo. Es diferente un jugador extranjero que un chileno, que son más respetuosos en ese sentido. No me gusta cómo actúa”, afirma Chuflinga.

Como Mendoza, Herrera relativiza la trascendencia futbolística de Falcón. “Siempre pensé lo mismo. Es un buen jugador, pero no es indispensable ni irremplazable. Está sobrevalorado, hay muchos mejores que él. A mí, por ejemplo, me gustaba mucho más Amor. Llegó muy bien, pero las lesiones lo perjudicaron, pero era un jugadorazo. Y Saldivia, que es un buen central, que da mucha seguridad. No veo el problema grave que podría tener Colo Colo si se va Falcón. Es reemplazable. Es un jugador normal nomás”, establece.

El análisis, dice, no es nuevo. “Desde que lo vi jugar, le hacía más daño a la defensa de Colo Colo que darle orden. Por su forma de jugar. Estaba en todos los puestos, menos de central”, repasa, a modo de revisión. La conclusión se refuerza. “Es totalmente reemplazable. Es un central muy desordenado. A los técnicos rivales les resulta aprovechar los espacios que deja. En cualquier duelo termina cayéndose, especulando. Eso hace pensar que no es el gran central que algunos piensan”, remata.

“De Elías Figueroa…”, ironiza Fernando Astengo cuando se le pide la referencia, aludiendo a la valoración que se le tiene al charrúa. “Yo creo que hay muchos jugadores que vienen y se informan qué equipo es Colo Colo y saben que si les va bien se les abrirán muchas puertas. Falcón está aprovechando su oportunidad y es válido. Independientemente de que tenga mi opinión, que no es Godín ni Montero. Él pelea cada pelota, lucha y es válido. Está aprovechando una oportunidad y ejerciendo una presión. Si se quedó, tiene una oferta. Acá estaba cómodo, la gente lo quiere. También debe ver los sueldos de los otros compañeros y siente que debería ganar más. En cualquier trabajo si te ofrecen más dinero, es válido. La gente se encariña y a nadie le gusta perder algo a lo que le tiene cariño. Trancaba con la cabeza”, apunta, en un tono más conciliador.

“No era Chano Garrido, Pablo Contreras, Miguel Ramírez, pero sí un tipo que se adaptó y entendió la forma de jugar en Colo Colo. Hay muchos que dicen que la MLS es un desastre, que es inferior, pero no sé hasta qué punto lo sea. Es una liga que está creciendo. En el Inter están Messi, Suárez, Busquets. Debe tenerlo más o menos decidido”, valora.

El análisis que el León hace de Peluca tiene elementos en ambos sentidos. “Falcón es un jugador que tiene lo típico que tienen los uruguayos, que no dan pelota por perdida, que empuja, que grita. Él, sí, magnifica más de la cuenta. Y se veía que no le había pasado nada. Eso contamina la visión que se tiene de él. Es un buen defensa central, pero jugó con esto de gritar cada pelota que quitaba. Yo grito si hago un gol. Eso es un poco vender humo. Colo Colo necesita un central que no sea puro pelotazo. Al principio eran a la tribuna. Ahora le empezó a apuntar a la cancha. Para ganar la Copa Libertadores, los jugadores tienen que estar por encima de la media.

“No estoy de acuerdo con que haya que matar a Falcón. Sí con que Colo Colo tiene que traer un central bueno, de los que saben jugar”, finaliza.