Chile y Uruguay: la historia de una rivalidad que comienza a ser clásica
Desde 1985 en adelante, el duelo entre la Roja y la Celeste registra episodios inolvidables.
Si le preguntan a un charrúa acerca del partido de esta noche, probablemente, la respuesta vendrá cargada de sarcasmo. "Les faltan 15 Copa América", contestará respecto del carácter de clásico que se le pretende dar al choque entre Chile y Uruguay. Eso sí, desde 1985, cuando se midieron por las Eliminatorias para el Mundial de México, hasta el enfrentamiento en la Copa América de 2015, marcado por la agresión de Gonzalo Jara a Edinson Cavani, hay elementos que elevaron la intensidad del duelo y que lo transformaron en atractivo.
La fecha citada en primera instancia está marcada por el tanto que Jorge Aravena le marcó a Rodolfo Rodríguez en el Estadio Nacional. Un tiro libre que, por el escaso ángulo que tenía el Mortero al momento de ejecutar el tiro libre, casi pegado a la línea de fondo, por el sector derecho del ataque nacional, fue denominado como el Gol Imposible. Han pasado más de 34 años desde esa conquista, que mantuvo la esperanza nacional de llegar al Mundial de México 1986, una clasificación que no se concretó. "Tenía una sola opción: meterle el borde interno y parte del empeine muy abajo a la pelota y comenzar a subir la pierna describiendo con ella una curva. A eso había que añadirle potencia para que la pelota subiera mucho y bajara violentamente. El remate fue fuerte", recordó en una entrevista con La Tercera en 2015. Ese día, en el Estadio Nacional, Chile se impuso por 2-0, pero la efervescencia no se apagó.
El partido de vuelta, muy en la línea de los enfrentamientos ochenteros, plagados de violencia y picardía, dejó en el recuerdo una situación insólita: Venancio Ramos le movió la pelota con un limón justo cuando el Mortero percutaba un disparo con claras opciones de gol para Chile.
En 1987, ambos combinados volvieron a verse las caras, ahora en el marco de la Copa América. La Roja y la Celeste definían el trofeo y el resultado favoreció a la escuadra oriental. El partido se disputó en el Monumental de River Plate. Pablo Bengoechea, con un remate de media distancia, marcó el único gol del encuentro que les daría a los uruguayos su 13º título continental. Chile, en cambio, tendría que seguir esperando. En la cancha hubo poco fútbol, pero sí muchas patadas. Algunas descalificadoras, como la que le costó la expulsión a Eduardo Gómez, por una entrada muy fuerte en contra de Enzo Francescoli.
Un choque siempre caliente
Las Eliminatorias para el Mundial de Francia 1998 entregarían otro de los momentos difícil de olvidar. Al margen del golazo de Marcelo Salas, quien conectó un preciso envío de Víctor Hugo Castañeda para darle la victoria a la escuadra de Nelson Acosta, lo que más se recuerda es la violentísima entrada de Luis Chavarría sobre Enzo Francescoli, la estrella de la Celeste. El oriundo de Monte Águila solo fue amonestado mientras que el Príncipe debió abandonar la cancha. "Gracias a Dios salió lesionado", diría, después, el mediocampista nacional.
En noviembre de 2011, el protagonista fue charrúa: Luis Suárez. Chile llegó al Centenario sacudido por las consecuencias del denominado Bautizazo, que involucró a Jean Beausejour, Jorge Valdivia, Carlos Carmona, Gonzalo Jara y Arturo Vidal. La actual estrella del Barcelona aprovechó las concesiones y venció en cuatro oportunidades a Claudio Bravo.
El 26 de marzo de 2013, en plena búsqueda de un sitio en el Mundial de Brasil, el protagonista excluyente fue Esteban Paredes. Jorge Sampaoli recurrió de urgencia al ariete, quien entonces militaba en el Atlante mexicano, ante la suspensión de Alexis Sánchez y los problemas físicos que evidenciaba Eduardo Vargas. El actual goleador albo respondió como mejor sabe: con el gol que abrió la victoria. El otro lo marcó Turboman.
La lista de episodios inolvidables se cierra con la recordada agresión de Gonzalo Jara a Edinson Cavani en el marco del partido que ambas selecciones protagonizaron en los cuartos de final de la Copa América que se disputó en Chile. La incidencia termino con el delantero charrúa expulsado, en una situación que terminó siendo clave para la victoria nacional, que sentenció el tanto de Mauricio Isla.
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