La inmensa alegría de Nicolás Jarry por ser campeón en Bastad se advierte apenas le gana el último punto de la final al argentino Juan Ignacio Lóndero. Se desahoga hincado y gritando al centro de la cancha. Se quita la gorra y sonriente alza los brazos. Saluda con la mano derecha al público y parte a la silla. Se quita las muñequeras y, siempre sonriente, empuña alternadamente una mano u la otra. Se quita la polera y se prepra para el momento soñado: la recepción de su primer trofeo en el circuito ATP.
Nicolás Jarry está feliz. Cumplió una semana perfecta. Ni siquiera dejó escapar un set. Por eso, después de la victoria sobre el transandino Juan Ignacio Lóndero dejó fluir sus emociones. Sin exageraciones, pero evidentemente feliz. Se abraza con algunos cercanos, bebe algo de agua y recibe las instrucciones protocolares. La copa lo espera en el centro de la pista. La mira de reojo.
Cuando lo anuncian para premiarlo, vuelve a alzar la mano derecha. Saluda a las autoridades del torneo, recibe el cheque simbólico, una caja y un ramo de flores, pero el momento más significativo se produce cuando recibe la copa. La mira, da un par de pasos hacia adelante y la alza. La vuelve a mirar.
"Quiero felicitar a Juan Ignacio por su gran año. Ya tuvo su primer título. Ahora me toca a mí. Agradezco al torneo, a los sponsors, al público, a todos. Pensé en muchas cosas, pero estoy muy feliz, realmente. Quiero agradecer a mi equipo. Tengo un gran equipo en casa, muy unidos. A mi familia, que es fundamental para mí, desde que nací", dice, en inglés durante la ceremonia que, con seguridad, recordará durante el resto de su carrera.
Y luego asume un compromiso. "Sí, por supuesto que volveré para defender el título. A todos los chilenos que están aquí en Suecia, gracias por venir", dice.
Más tarde, el rito habitual del champañazo, bajo la advertencia de la presentadora de que no la moje. Un brindis que comparte con quienes lo han acompañado en la gira. La sonrisa jamás desapareció del rostro de Jarry. Un par de fotos, ahora con Lóndero y los trofeos de ambos, y la vía libre para festejar. Merecidamente.
Más tarde, a través de un video que publicó en su cuenta en Twitter, volvió a volcar su felicidad. "Bueno, aquí estamos, con la primera copita. La verdad es que estoy muy feliz de que haya llegado después de varios intentos. Fue un partido muy duro. Las condiciones estaban muy ventosas. Estoy sumamente contento de haber podido sacarlo adelante. Fue una semana increíble, donde jugué muy bien. Ahora queda celebrar. El primero cuesta mucho y hay que valorarlo mucho. Que estén bien", fue el mensaje que grabó para sus seguidores bajo el título El primero y dos emoticones: una cara alegre y un trofeo.
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