Hace poco más de 10 años, el 14 de febrero de 2013 el paratleta sudafricano Oscar Pistorius cometió un crimen que lo llevó a prisión. El múltiple medallista mundial y paralímpico asesinó a su pareja Reeva Steenkamp mientras se encontraba en su domicilio en Pretoria, Sudáfrica.
A raíz de esto, y tras una serie de modificaciones, Pistorius fue condenado a 15 años de prisión. Una vez que cumplió la mitad de esta pena, el atleta pidió iniciar los trámites para iniciar la solicitud de libertad condicional, uno de los beneficios que entrega la justicia sudafricana después de que el condenado cumple la mitad de su castigo.
Hace algunas semanas se llevó a cabo su traslado a una cárcel cercana al lugar donde viven los padres de su expareja con el fin de facilitar el proceso conocido como “diálogo entre víctima y delincuente”.
Sin embargo, este viernes una junta ha negado la solicitud de libertad condicional de Pistorius. Según informó el Departamento de Servicios Penitenciarios de Sudáfrica, en la que se reunieron representantes de la entidad, la policía y civiles, adoptaron la decisión de mantenerlo prisionero.
Antes del inicio de esta reunión la abogada y los padres de la víctima se mostraron abiertamente en contra de que se le permitiera al atleta salir en libertad.
“Es una experiencia muy traumática (para los padres). Como pueden imaginar, es doloroso tener que volver a ver a Oscar Pistorius esta mañana”, señaló antes de la audiencia la abogada Tania Koen.
“Es el asesino de su hija y no creemos que deba ser puesto en libertad. Pensamos que no ha mostrado su remordimiento. No está rehabilitado porque, si lo estuviera, habría confesado y contado la verdadera historia de lo que pasó aquella noche”, añadió.
A su vez, June Steenkamp, madre de la víctima, declaró estar “muy nerviosa” y aseguró que le resultaría “muy duro” estar en la misma sala con Pistorius. Así mismo, expuso que rechazaba la libertad condicional del atleta. “No me creo su historia”, planteó.
El juicio
Tras un juicio que llamó la atención mediática mundial, Pistorius fue condenado inicialmente en 2014 a cinco años de prisión por homicidio culpable, pues la jueza consideró que existían circunstancias atenuantes.
Sin embargo, en noviembre de 2015 la Corte Suprema de Apelaciones de Sudáfrica anuló la condena iniciar se le declaró culpable de asesinato, por lo que se debía establecer una nueva sentencia. Así, en julio de 2016, la magistrada Thokozile Masipa sentenció a Pistorius a seis años.
Claro que con otro recurso de la Fiscalía la Corte Suprema de Apelación elevó la pena en noviembre de 2017 a 15 años, lo que en la práctica terminó siendo de 13 años y cinco meses, descontando el tiempo que pasó bajo libertad bajo fianza y arresto domiciliario.