¿La magia vuelve al Camp Nou?: el hijo de Ronaldinho se prueba en el Barcelona

Ronaldinho es una leyenda del Barcelona. También lo es del fútbol mundial, al que cambió añadiéndole toques de magia propios de los partidos playeros en plena disputa de las competencias más importantes del planeta, pero es en el Camp Nou donde sus recuerdos resultan imborrables. Hasta ahora, de hecho, deslumbra en cada partido de futbolistas históricos que disputa con la camiseta azulgrana. Joao Mendes de Assis Moreira puede seguir sus pasos. El también delantero, aunque en una demarcación distinta, pues prefiere situarse en el centro del ataque, está probándose en el equipo azulgrana.

Joao Mendes, de 17 años, está entrenando con el Juvenil A del Barça. Lo hace después de poner término a su relación con el Cruzeiro, de propiedad de otra estrella de una de las generaciones más pródigas que ha arrojado el fútbol brasileño: Ronaldo. Mide 1,78 metros, es zurdo y desde pequeño tuvo que lidiar con el peso de ser el hijo de uno de los jugadores más icónicos del fútbol a nivel global.

Convivir con la imagen de su padre no le ha resultado fácil a Joao, quien a los 14 años, cuando firmó por la Raposa, decidió ocultar su identidad, precisamente para reducir lo más posible las comparaciones y, fundamentalmente, la presión que sentía. Otro propósito fundamental para la determinación era, precisamente, no sacar ventajas y generarse un camino en el fútbol en base a sus condiciones y méritos y no por la influencia que pudiera ejercer el múltiple campeón.

Indefectiblemente, las comparaciones llegan y seguirán llegando. De hecho, la prensa española menciona el currículo de Ronaldinho a la hora de hablar de expectativas, lo de que resulta demoledor de por sí: solo con el Barça, el habilidoso jugador sumó 95 goles en 210 partidos, muchos de ellos haciendo gala de sus inagotables condiciones técnicas. A nivel de títulos, sumó dos ligas, dos Supercopa y la Champions League de 2005-06.

Por lo pronto, su eventual fichaje en el club culé se trata a alto nivel: el presidente Joan Laporta lo gestiona directamente con Ronaldinho. Eso sí, el filtro lo establecerán los respectivos entrenadores que revisen las condiciones del incipiente jugador.