La estadounidense Sloane Stephens venció en la final a la letona Jelena Ostapenko y se coronó campeona del torneo de tenis de Miami. Stephens, decimotercera sembrada, superó a la europea, sexta favorita, por 7-6 (5) y 6-1, en una final inédita del certamen que se disputa en Key Biscayne.
Ambas tuvieron su mejor actuación en el torneo de Miami, pues Sloane había llegado hasta cuartos en 2015, cuando cayó ante la rumana Simona Halep, mientras que en dos apariciones previas Ostapenko no había pasado de primera ronda.
La ganadora se lleva un premio de un 1.340.860 dólares y 1.000 puntos para el escalafón de la WTA. En tanto, Ostapenko logró 654.380 dólares y 650 puntos .
"Los fanáticos fueron simplemente increíbles", manifestó Stephens. "Fueron dos semanas maravillosas, juego muy bien en los Estados Unidos. No estoy segura de por qué, pero tal vez sea por el apoyo de la gente".
Sloane añadió que "he pasado por muchos altibajos, por esto tengo que agradecer mucho a mi equipo".
Por su parte, Ostapenko le deseo lo mejor a la estadounidense al decirle que "bien hecho Sloane, jugaste increíble".
Sloane puede ser la sucesora de Serena Williams en el circuito por empuje y estilo, pues parece ser una copia en la forma de jugar, ya que se desempeña muy parecido a aquella leyenda del tenis.
Stephens llegó a la final después de eliminar entre otras a la española Garbiñe Muguruza, tercera favorita, a la alemana Angelique Kerber y, en semifinales, a la veterana bielorrusa y tricampeona del torneo Victoria Azarenka.
Es la primera estadounidense en levantar el trofeo de Miami desde que en el 2015 lo hiciera Serena Williams, ganadora de ocho coronas en esta cita y que en esta edición fue eliminada en primera ronda.
Por su parte, Ostapenko se quedó con las ganas de convertirse en la primera de su país en alzar esa copa.
La final masculina
El estadounidense John Isner y la joven estrella alemana Alexander Zverev se disputarán hoy el título masculino del Masters 1000, el último partido en el histórico Crandon Park.
Isner podría transformarse en el primer estadounidense en ganar desde que Andy Roddick lograra su segundo título en 2010.
Para ello deberá batir por primera vez a Zverev, pues hasta la fecha sus tres enfrentamientos se han saldado con sendas derrotas, dos de ellas el año pasado, una en Roma y la segunda en la pasada edición del torneo de Miami, aunque las dos a tres sets y con un tie break de por medio.
El de Hamburgo quiere enfrentarlo como si fuera un partido "totalmente diferente" y centrarse en las fortalezas que lo llevaron hasta la final y lo pueden poner Nº3 del ATP.b