Claudio Borghi está entre dos amores. Por un lado, el original. Argentino de nacimiento, el Bichi tocó el cielo en 1986, cuando logró el título del mundo con la escuadra que dirigía Carlos Bilardo y capitaneaba Diego Maradona. Mucho se ha escrito respecto del inconmensurable talento que le llevó a integrar ese plantel y de la comparación con el mejor futbolista del siglo XX, según la FIFA, en un salomónico empate con Pelé.
Por otro lado, el Bichi tiene un amor adoptivo. Chile es el país que le acogió a comienzos de la década de los 90, cuando llegó al país para defender a Colo Colo, y que hizo suyo con el transcurso de los años. Hoy es, en efecto, un chileno más. A comienzos de la década anterior, de hecho, dirigió a la Roja, justo en el intertanto de las gestiones de Marcelo Bielsa y Jorge Sampaoli.
El análisis
Por cualquiera de esos factores, e incluso por algún otro, Borghi es una opinión autorizada. Para hablar del partido, de Chile y, por cierto, de la Albiceleste o de alguno de sus protagonistas, a quienes conoce en detalle. El Bichi chileno, de hecho, está inquieto. “Chile le ha ganado más a Brasil que a Argentina, pero la esperanza de hacer un buen partido siempre está. Lo que se vio con Perú fue bien chato, muy preocupante. Ahora tiene que jugarse esta chance con Argentina y después ver qué pasa con Canadá”, sostiene.
En ese plano, es cauteloso. “Distancias hay, siempre las hubo. Chile tuvo la oportunidad de ganar dos finales con una generación que ya está acabando; y el problema de Chile es la renovación”, diagnostica.
La versión argentina del estratega, ahora convertido en comentarista televisivo, se detiene especialmente en Lionel Scaloni. Su opinión respecto del estratega es peculiar lo que, por cierto, pone a Argentina a debatir respecto de sus palabras. “A mí me parece que no es argentino. Porque no se queja, no putea, no hace devoluciones a periodistas que pensaron que no podía ser el técnico, nunca se vengó, nunca tuvo ira o bronca con alguien”, sostiene, en declaraciones ofrecidas a TyC Sports.
Cambios interesantes
La valoración se centra, después, en la propuesta futbolística del ex jugador del Deportivo La Coruña. “Me sorprendió porque hizo cambios ofensivos, defensivos... Está muy bien respaldado con tres tipos muy interesantes. Hay un equipo de trabajo maravilloso. Scaloni lleva muy bien las riendas de la selección argentina”, puntualiza.
Luego habla de la vigencia de las principales figuras transandinas. “Me sorprende lo longevos que son estos chicos. Cada tanto Dios tiene esta gentileza con Argentina y le hace nacer uno de estos tipos. Te sale un Di Stéfano, un Kempes, un Maradona, un Messi. Argentina es una tierra elegida y protegida en ese sentido”, expresa.