Emiliano Vecchio volvió este año a Unión Española. El retorno del mediocampista, después de 12 años de su primer paso por el club de Independencia fue anunciado con toda la relevancia que implica el regreso de un jugador que logró ganarse el cariño y el respeto de una entidad, pese a que el recorrido fue leve. Jugó 47 partidos antes de marcharse a Colo Colo y, luego, iniciar un recorrido que incluyó pasos por Qatar, Brasil, Emiratos Árabes, Arabia Saudita, Bolivia y el fútbol argentino. La de Racing fue la última camiseta que vistió antes de materializar su vuelta a los rojos.
Ahora, sin embargo, Vecchio pone en duda su continuidad en el club. No con efecto inmediato, sino más allá del contrato que lo liga con el club de colonia, que se prolonga hasta diciembre. Lo que pase en el primer día del próximo año es, en efecto, lo que nadie puede aventurar.
La pataleta de Vecchio
El volante habló después del empate sin goles entre Unión Española y Ñublense, en Chillán. Si el resultado ya no había dejado satisfechos a los hispanos, la declaración del mediocampista solo consiguió ampliar la inquietud. “Mi contrato es hasta diciembre. Yo me siento cada vez mejor, me siento bien. La verdad es que, si te soy sincero, para seguir en el club deberían pasar cosas. Entre comillas deben cambiar algunas cosas que están muy alejadas a lo que soy yo”, planteó, directamente, en el medio partidario Independencia Hispana.
Vecchio reforzó la idea. “Es muy difícil que siga, no te voy a mentir. Intentaré dar lo mejor de mí hasta diciembre, aportar mi granito de arena para que Unión Española esté en copas internacionales y después irme a mi casa tranquilo”, sentenció, procurando ser lo suficientemente claro respecto de su devenir.
De cualquier forma, se comprometió a no desviar la atención en lo concerniente a la actual temporada. “Estamos en mitad de campeonato y cada uno tiene que dar lo mejor en función del equipo donde toque. Quedan dos meses y cuando termine todo podremos hablar de otra manera. Después veré lo que haremos”, sentenció, respecto de cómo afrontará sus compromisos más urgentes.
La otras polémicas
En abril, Vecchio había dado otra manifestación de una personalidad díscola. Después del partido frente a Universidad de Chile, el juez Diego Flores le acusó de haberle insultado e, incluso, amenazado. Aunque se disculpó públicamente, el Tribunal de Disciplina fue drástico: cuatro partidos de castigo.
El informe de Flores había sido lo suficientemente contundente como para justificar la enérgica sanción. “Hago presente que una vez finalizado el partido y luego de retirarnos del campo de juego, ya en el sector de ingreso a los camarines, el jugador Nro. 10 de Unión Española Sr. Emiliano Vecchio, que fue expulsado al término del partido, aborda al equipo arbitral frente a la puerta del camarín de árbitros y de manera desafiante y exaltada me grita ‘nos cagaste, son unos malos de mierda, eres un canchero de mierda, nos robaste’”, consignó el juez.
“El jugador continuó con su actitud y luego me grita ‘Te crees muy canchero, si me dan diez fechas te voy a salir a matar en la prensa, canchero de mierda, nos robaste’. Cuando finalmente logramos entrar al camarín, este jugador continuó con su actitud violenta y me desafía a pelear a golpes diciendo ‘Sal afuera, ¿no eres tan canchero?, ven, aquí te espero, ladrón de mierda”, prosiguió el decidor relato.
Su historial de situaciones controvertidas es mucho más amplio. En 2012, por ejemplo, inventó la muerte de su hermano para intentar viajar a Argentina. “Esa fue bravísima. Organizo el casamiento, no tenía un centavo. Me prestaron la plata. Pago el casamiento. Tarjeta y todo. 160 personas. Me la jugué toda, pagada como en cinco años. El técnico me dijo que en esa fecha yo no me podía ir porque teníamos un partido complicado. En Unión Española, con el Coto Sierra, mi papá”, reconoció, años después, en diálogo con TyC Sports.
En 2013, cuando jugaba en Colo Colo, enfrentó a los hispanos, que se jugaban el título ante la UC. Ejecutó todos los lanzamientos de esquina a cualquier parte. “Por el amor que yo le tengo a Unión y porque era el clásico rival nuestro, no les iba a hacer un gol. Ganó Unión Española, salimos campeones. Los córners fueron un poquito pasados”, admitió.
Dos años después, se lanzó contra Johnny Herrera. ““Hay algunos que abusan del Twitter y que salen hablando de los cristianos y que se acuerdan de la Biblia cuando les conviene”, lanzó el exportero. Vecchio contestó: “No me avergüenzo de leer la Biblia…Sí me avergonzaría salir todos los días a la calle sabiendo que mate a una persona, que cara rota” (sic), replicó, en Twitter.