"Y el ganador es… ¡Joaquín Niemann!" era una oración no muy extraña de escuchar mes a mes en el Club de Golf Las Palmas de Talagante. Lo que sí resultaba raro era que el niño de apenas 12 años nunca estuviese presente para recoger su premio. "¡Joaquín Niemann!", repetían por micrófono ya no tanto como un anuncio sino como un llamado para que apareciese, lo que se cumplía minutos después tras la búsqueda de su padre, Jorge. "Gracias", respondía al fin Joaco sin demasiados aspavientos. Quería volver rápido a lo que estaba haciendo antes de que lo interrumpieran, a lo único que le interesaba desde que tenía uso de razón. Quería jugar golf.

Golf. El deporte de precisión que no se juega con las manos, sino con los hombros. Donde el ganador es el que le pega menos a la pelota. Con circuitos de cinco horas, de las cuales se pasan caminando cuatro. Golf. Lo que practica Niemann desde los tres años cuando andaba pegándole a todo lo que se cruzara en su camino con un palito de plástico, realizando un swing increíble para su edad según cuenta su padre. Golf. La profesión que lo ha convertido en el mejor exponente nacional de la historia a sus lozanos 21 años. Que le ha llevado a ganar un torneo profesional en apenas su segunda temporada en el PGA Tour. Que le ha valido el reconocimiento de sus pares más veteranos, algunos históricos, quienes no demoran en elogiar su talento y señalar al tiempo como el único factor restante para que alcance su máximo potencial. Golf.

Como en cada una de las historias de los prodigios, la precocidad en la práctica suele vaticinar la excelencia. Si en la ecuación se incluye un fanatismo desmesurado, casi obsesivo, el producto resultante no es nada más que el éxito. Niemann es prueba fehaciente de estas dos premisas. Su temprana incursión en este deporte —que conoció gracias a su progenitor— se complementó con un entrenamiento diario que casi no tenía descanso. No por imposición de la familia ni mucho menos: Joaquín solo pensaba en jugar. Y claro, vivir literalmente dentro de un campo de golf ayudaba en su deseo.

El condominio Las Palmas fue el hogar de los Niemann desde 2000 hasta 2010. Se trata de un retirado —y muy acomodado— terreno de 147 hectáreas ubicado en las profundidades de Talagante, y cuyo núcleo, casi su razón de ser, es el circuito de golf que lleva el mismo nombre. Fundado por Miguel Ángel Oliva, el campo contaba en sus inicios con 18 hoyos, aunque ahora solo quedan nueve. El favorito de Niemann, aquel posicionado al frente de su casa, el que podía observar desde su balcón antes de dormir, en lugar en el que pasó la mayor parte de su infancia; aún sobrevive. Un par tres, réplica casi exacta del bello y famoso —aunque complicado e intimidante— hoyo 17 del TPC Sawgrass, hogar del The Players que se disputará en marzo y que contará con la presencia del chileno. Era llegar del colegio, tirar la mochila, cambiarse de ropa, tomar una lechecita, cruzar la calle y ponerse a jugar. Todos los santos días.

Quienes vieron crecer a Niemann entre palmeras, nogales y cedros, lo describen como un niño "absolutamente normal" y recalcan que su fanatismo por el golf "nunca fue una obsesión". "Jugaba sin presiones. En ocasiones lo hacía solo, con su profesor, con su papá o con los amigos. Simplemente su desviación no era ni la tele ni los videojuegos, sino el golf. Eso era lo que le gustaba a él", relata Fernando Uribe-Etxeverría, exvicepresidente del club y vecino de los Niemann. "Practicaba otros deportes y lo hacía bien. Se reunía con mis nietos a ver a Tiger Woods por la tele, participaba en los asados familiares. Un niño normal que jamás hizo un berrinche al pegarle mal a la pelota, humilde, que nunca hizo ostentación de su talento", complementa el abogado.

Joaquín pasaba la mayor parte del tiempo en el circuito frente a su casa. Recorría los tres kilómetros de longitud varias veces al día. Su mayor entretención consistía en levantar la pelota por sobre la laguna artificial que remeda a la mítica del Sawgrass, y hacer que cayera en el green que se encuentra en la isla. Un ejercicio en extremo difícil dada la complejidad del hoyo pero que el pequeño Niemann no demoró en dominar. "Todos los cabros que jugaban acá eran buenos para el golf, porque esta cancha es mucho más exigente que otras", asegura Miguel Ángel Oliva. "Entonces Joaquín practicó desde pequeño en un nivel muy competitivo", agrega. La exposición tempranera al alto nivel, otro factor clave en la excelencia.

"Uno normalmente ve que hubo un papá que estaba encima y que lo impulsó. No. Aquí no es el caso. Todo lo contrario: él impulso a los papás", asevera Uribe-Etxeverría. Y Jorge Niemann, padre del golfista, lo confirma: "Para mí era importante que disfrutara, porque en ese tiempo creía que el golf era un deporte para viejos, entonces si lo presionaba se iba a aburrir. Yo lo dejaba hacer. Ya más grande, en los campeonatos, nunca me metí en lo técnico ni a forzarlo a ganar, sino que lo pasara bien donde estuviera jugando". Para Niemann Sr., aquel approach explica el éxito actual de su hijo. "Es una de las claves. Si lo ves jugar no sabes si va ganando o perdiendo, siempre tiene la misma cara de enfocado en su juego y no en el resultado. Y siempre ha sido así. Una vez se puso a llorar en Estados Unidos tras un mal golpe y le dije que no íbamos a viajar nueve mil kilómetros para que estuviese sufriendo, que para eso lo hacía en Santiago. Y nunca más", relata.

Jorge aún recuerda la primera vez que llevó a Joaquín al club. "Debe haber tenido unos cinco años y ya andaba con sus palitos de fierro. Lo llevé a la cancha de prácticas y ahí comenzó a jugar. Estaba fascinado, no se quería venir". Tampoco olvida los rasgos de su hijo cuando niño, la mayoría todavía presentes en su personalidad: "Amigo de sus amigos, muy alegre y bueno para los deportes. En el colegio ganaba los torneos de mountain bike, de atletismo, de cross country. Era completísimo, tenía un gen deportivo importante, pero que encontró su veta en el golf".

El legado de Orfila

"Yo entrenaba a estos chicos de 14 años cuando Joaquín, con siete, se integró al grupo. Y antes de conocerlo tenía mis dudas de cómo esto iba a funcionar: era un niñito al lado de unos gorilones. Y desde el primero día Joaquín mostró una madurez para jugar mayor a la de los otros grandullones. Increíble. No había que ser muy perspicaz para notar que era especial". Quien narra es Gonzalo Orfila, primer profesor de golf en la carrera de Niemann, aquel que le enseñó los fundamentos del deporte y que lo tuvo a cargo por cuatro años. Desde Mendoza relata a El Deportivo las genialidades con las que el niño lo sorprendía en el día a día, como cuando en vez de celebrar su cumpleaños quiso seguir entrenando.

"Fue cuando cumplió nueve. Estábamos entrenando con el grupo de los grandes y justo era su cumpleaños. Entonces dije que paráramos un rato para festejar. Que iba a comprar una torta y unas bebidas. Todos estaban saltando en una pata menos Joaquín, que me mira con una cara diciendo 'no, flaco, así no'. Le pregunto si quería seguir entrenando o festejar y me dice 'seguir entrenando'. Impresionante. Los otros se querían morir", cuenta Orfila.

Ambos siguen teniendo contacto, aunque no tanto como le gustaría al argentino. Orfila no esconde su cariño por Joaco ni tampoco el dolor que sintió cuando se fue de su tutela para partir a Santiago. Asegura que el golfista chileno no tiene techo y que solo falta tiempo para que sea el mejor. Y ante la pregunta sobre qué legado le dejó a Niemann, no duda: "Creo que le enseñé a amar el juego. Porque a él ya le gustaba, pero yo le enseñé a amarlo. Es todo un caballero y me pone orgulloso verlo".

VOTACIÓN MEJOR DEPORTISTA

23 Joaquín Niemann

19 Melita y Antonia Abraham

11 Christiane Endler

10 Marco y Esteban Grimalt

7 Fernanda Valdés

4 Christian Garin

4 Valentina Toro

3 Tomás González

3 Francisca Crovetto

3 Francisca Mardones

2 María José Moya

1 Esteban Bustos

1 Felipe Miranda

1 Gabriel Kehr

1 Simona Castro

1 Marco Oneto

1 Bárbara Hernández

1 Yasmani Acosta

1 Thomas Briceño

1 María José Mailliard

2 No sabe/no responde

VOTACIÓN HITO DEL AÑO

18 El título en el PGA Tour de Niemann

16 El resultado del remo en Lima

10 Los récords mundiales de Francisca Mardones

9 El oro de los Grimalt en Lima

9 El resultado del Team Chile en los Panamericanos

4 El oro de Fernanda Valdés en Lima

4 El título mundial Sub 21 de Valentina Toro

3 El triunfo de Chaleco López en el Dakar

3 Los dos títulos ATP de Christian Garin

2 El oro de Gabriel Kehn en Lima

2 La presentación de la selección femenina de fútbol en el Mundial.

2 El oro de Thomas Briceño en Lima

1 El balonmano en Lima

1 El karate en Lima

1 La diferencia de puntos en el título de la UC

1 El título mundial de María José Mailliard

1 Medallas mundiales de Fernanda Valdés

1 Oro de Jadue en Lima

1 Medalla y clasificación a los JJOO de Martín Vidaurre

1 Niemann en la Presidents Cup

1 El récord de Esteban Paredes

1 Endler candidata a The Best

1 La campaña de Valentina González

1 Esteban Bustos en Lima

1 Oro-plata del martillo en Lima

1 Köbrich va a sus quintos JJOO

1 Oro de María José Moya en Lima

1 Oro de Juan Carlos Garrido en Lima

1 Clasificación de Simona Castro a los JJOO