Inmediatamente después de ganarle a O'Higgins, Universidad de Chile comenzó a vivir el Superclásico. David Pizarro aludió al largo período que llevan los azules sin ganar en Macul. El Fantasista le traspasó la responsabilidad a Colo Colo. "La presión no la tenemos nosotros. Ningún plantel de Colo Colo va a querer perder 18 años de invicto", declaró el porteño en alusión al último triunfo estudiantil en el Monumental: el 2-3 del 9 de septiembre de 2001. 17 años pasaron desde ese hito. "Estamos disfrutando, tratando de no cargarnos de presión", añadió, ayer, Gustavo Lorenzetti.
Históricos de ambos equipos debaten en torno a la frase de Pizarro y le asignan a la escuadra de Tapia un favoritismo que radica, más que en el factor mental, en el funcionamiento y en la jerarquía de sus jugadores.
"Es un juego de palabras. Siempre se ha intentado cargarle la presión al rival, pero la gente de la U tiene que asumirla. No va a quitar ni poner decir 'somos favoritos'", dice Víctor Hugo Castañeda, quien alude el choque que ambos equipos protagonizaron en 2016. "Futbolísticamente, Colo Colo llega mejor, más sólido, acostumbrado a este tipo de partidos. Cuando tiene a todos sus jugadores, Tapia arma un equipo poderoso. La U ganó el fin de semana, pero no fue un buen partido. No se ha visto un cambio significativo en la transición desde Hoyos a Kudelka", afirma Sergio Vargas, emblemático arquero de la U.
Roberto Reynero, capitán estudiantil en los 80, agrega: "La presión es de la U y el favoritismo, de Colo Colo. Ojalá que la U se saque esa mochila grande, que le pesa, pero con lo que está jugando Colo Colo, que cuidó jugadores, se ve mejor".
En el Cacique consideran que las declaraciones de Pizarro constituyen parte de una estrategia típica de este tipo de encuentros. "Pizarro está traspasándole la presión a Colo Colo, pero los responsables son ellos, porque tienen la obligación de ganar y de romper la racha", asegura Leonel Herrera, defensa del mítico Colo Colo subcampeón de América en 1973. A su turno, Daniel Morón, arquero del equipo que en 1991 se quedó con la Copa Libertadores, también la endosa. "La presión debe ser más fuerte para el equipo que lleva 17 años sin romper ese hito. Para Colo Colo es una obligación. Para la U es más complicado que se siga estirando una paternidad tan larga", apunta.
Vaccia, el último DT azul que salió airoso del Monumental, recomienda concentración máxima. "No hay receta que se pueda dar. Ese día, hay que hacer buenas transiciones defensivas y en ataque. No se puede quedar supeditado a alguna atajada de Johnny, a algún desborde de Soteldo o a un pase de David".
El estratega también le asigna un valor fundamental al factor mental del que Pizarro se desliga. "Antes de 2001, veníamos de ganar tres veces ahí. Tiene peso el factor mental, que es individual. La suma de esa fortaleza eleva el rendimiento general. En el Monumental no se gana con una buena arenga, nada más", concluye.