Arturo Vidal se vuelve a enfocar. El volante, quien no fue considerado para el partido que el Bayern Múnich sostendrá ante el Hertha Berlín, por la Bundesliga, debido a una fatiga muscular, viaja a Chile para incorporarse a la Selección de cara a los cruciales encuentros frente a Ecuador y Brasil. Y lo hace completamente mentalizado y con una promesa a cuestas.
Después de las caídas frente a Paraguay y Bolivia, el mediocampista había deslizado sus dudas respecto de su continuidad en el combinado. Con el pasar de los días, fue retomando la motivación y, antes de partir a Chile, les dejó un mensaje a sus hijos. “Descansen hijos míos. Papá tiene que trabajar y llevar a Chile al Mundial”, escribió en su cuenta en Instagram, otra muestra de la ‘reconciliación’ del Rey con la Roja.
En Juan Pinto Durán, el volante se someterá a las respectivas revisiones físicas para determinar si está en condiciones de disputar la doble fecha eliminatoria.