La razón por la que Unión Española rebotó en su intento de fichar a un arquero de Peñarol

El diagnóstico para la lesión que sufrió Sebastián Pérez fue lapidario: rotura del tendón extensor del pulgar de la mano derecha. El golero fue intervenido quirúrgicamente este miércoles y el informe médico fue lapidario: la recuperación excederá los plazos del Campeonato.

Las primeras alternativas para reemplazarle son dos hombres de casa: Alonso Montecinos y Juan José Echave. El primero tiene 24 años y el segundo, 22. Ninguno cuenta con la experiencia suficiente en Primera División, aunque públicamente el técnico Ronald Fuentes les ha entregado su respaldo.

La dirigencia activó inmediatamente el plan de emergencia para sustituir al Zanahoria. La reglamentación permite reemplazar en cualquier momento a un guardameta frente a una lesión grave. Para los jugadores de campo, el plazo está acotado: el trámite se puede realizar hasta la vigésimo segunda jornada. Para que se produzca el cambio, el primer trámite es que el jugador que se inhabilitará por motivos de fuerza mayor firme la respectiva autorización.

Unión Española activó rápidamente el operativo y dio con el nombre de Thiago Cardozo, guardameta uruguayo, de 27 años, que pertenece a Peñarol. Experiencia, al menos, no le faltaba: este año llegó a ser el capitán del equipo aurinegro, aunque las discretas actuaciones que cumplió, sobre todo en la Copa Sudamericana, le costaron el puesto, que ahora detenta Guillermo de Amores.

Cardozo suma 48 partidos en los girasoles, con 51 goles en contra. En 2021 actuó en préstamo en Deportivo Maldonado, en el que actuó en 10 partidos y recibió 12 goles. En su etapa formativa fue seleccionado uruguayo en las categorías Sub 17 y Sub 20. En su palmarés luce tres Campeonatos Uruguayo y dos Supercopa. Además, aparecen dos torneos de Apertura y dos de Clausura.

Sin embargo, la ANFP no visó el fichaje. Las razones son estrictamente reglamentarias. La prerrogativa se puede utilizar con jugadores libres y nacionales. Ninguna es antojadiza: el TMS, el sistema en el que se registran los traspasos de los futbolistas se cerró el 1 de septiembre, por lo que resulta imposible consignar a un jugador proveniente desde otra liga. Distinto es el caso de uno local, para el que solo bastaría la inscripción interna.

La operación por Cardozo implicaba el préstamo por una temporada con una opción de compra por el 60 por ciento de sus derechos económicos. Sin embargo, el guardameta charrúa ni siquiera alcanzó a preparar las maletas cuando se enteró de que, finalmente, no podrá integrar la escuadra de Independencia.