Gustavo Costas volvió al lugar que lo vio nacer como deportista. Surgido de las divisiones inferiores de Racing Club se transformó en uno de los ídolos del cuadro de Avellaneda. En este equipo realizó su debut como profesional en 1981 y estuvo ahí hasta 1992 cuando fue vendido al FC Locarno de Suiza. Luego, regresó a la Academia en 1994 para luego ser transferido a Gimnasia de Jujuy, donde se retiró como futbolista.
Claro que su relación con Racing no paró ahí. En 1999 estuvo a cargo de la escuadra como técnico, puesto que mantuvo hasta el año siguiente. Tras pasos por Guaraní, Alianza Lima y Cerro Porteño, regresó en 2007. Y ahora ha tomado el cargo de los albicelestes.
Todo aquello ha hecho que su fanatismo por el club sea evidente, situación que quedó más que clara cuando dio a conocer una de sus reglas que ha implementado en el plantel: nadie puede usar el color rojo.
Así lo dejó claro en una entrevista con el diario Olé, donde se le consultó sobre el color que identifica a Independiente. “Está prohibido, es algo de familia ya. En mi casa tampoco... Acá nadie puede usar el rojo. No tengo nada rojo”, respondió.
Más adelante, y tras las risas, contó cómo ha sido su relación con el otro equipo de Avellaneda, su clásico rival. “Hay respeto. Yo nací y me crie acá en Avellaneda. Tengo muchos amigos hinchas de Independiente. Eran más de ellos que de los nuestros. Había que tener huevos para ser hincha de Racing en Avellaneda en esa época”, sostuvo.
También recordó su paso por Independiente de Santa Fe de Colombia, que además de compartir parte del nombre, utiliza el mismo color principal en la camiseta. “Yo iba con una de color gris. Y ahí es donde gané más campeonatos: cinco. Y cada vez que salíamos campeones, nos daban la roja pero yo la llevaba en la mano”, comentó.
“Yo a ellos les hablaba siempre de Racing. Es más, uno de los pibes de la barra de Santa Fe tenía el escudo de Racing. Al día de hoy ellos me llaman por teléfono. El equipo se llama Santa Fe”, finalizó.
Mal arranque
Hace algunos días se retomó la competencia en Argentina y el equipo de Gustavo Costas no consiguió hacerlo de la mejor manera, pues terminó cayendo como local contra Unión por 1-0. Allí el DT se mostró bastante autocrítico por lo mostrado.
“No era lo que esperábamos. Hicimos un primer tiempo muy malo, desastroso, nos ganaban todas, los duelos individuales, no supimos pararnos. El segundo tiempo fue un poco más parejo pero tampoco fue lo que queríamos nosotros. Tal vez lo podríamos haber empatado como tal vez nos podrían haber hecho otro. No voy a poner excusas, se jugó mal, y cuando se juega mal muchas veces te toca perder. Hay que seguir trabajando, buscando alternativas. Hoy algunos chicos entraron bien, tenemos un partido dentro de tres días y hay que aprovechar todos los cambios para estar al 100%”, apuntó el entrenador en conferencia de prensa.
Además, Costas se centró en la actitud del equipo y en la necesidad de reponerse ante momentos complejos: “Más allá del resultado, la poca personalidad que tuvimos en el primer tiempo. No la pudimos agarrar, ellos tuvieron la pelota, Unión hizo un primer tiempo bárbaro y nosotros no supimos cómo resolverlo, eso es lo que más me duele. Cuando no te salen las cosas tienes que tener esa rebeldía, actitud para revertir la situación, eso nos pasó”, cerró.