Chile se lleva los tres puntos ante Perú principalmente gracias al acierto de Diego Valdés. En un partido complicado para la delantera nacional, donde sus dos principales cartas ofensivas (Sánchez y Brereton) no vieron al arco, el mediocampista del América rompió el empate y selló la victoria nacional. Un premio para un jugador muchas veces cuestionado, pero que tiene el total respaldo de Berizzo.
En este arranque de Eliminatorias ha sido titular en los tres encuentros, dejando claro que es la carta del ex entrenador del Celta para liderar la creación del juego de la Roja. Un puesto complejo en la selección nacional, que no ha sido llenado del todo tras los pasos de Matías Fernández y Jorge Valdivia en el Equipo de Todos. Incluso muchas veces Alexis Sánchez tuvo que tratar de ocupar ese puesto mientras llegaba otro jugador que pudiera conducir el juego nacional.
Y ahora todo parece indicar que Valdés será ese hombre. Brilló ante República Dominicana en los amistosos previo al inicio de las Eliminatorias, pero después tuvo un mezquino actuar ante Bolivia. Dualidad que lo hizo llegar cuestionado al duelo ante Uruguay, donde tampoco pudo brillar. Ante Colombia mejoró y ahora ante Perú brilló. Convirtió su segundo gol en 29 partidos para la selección nacional, entregando de paso tres puntos que de seguro serán claves para el sueño de entrar al Mundial de 2026.
Tras 89 minutos jugados frente a la selección de Perú, el formado en Audax Italiano dejó la cancha con grandes números. Tocó 77 veces la pelota y entregó un total de 47 pases, de los cuales 39 fueron bien entregados, poco más de un 80% de efectividad. Probó cuatro veces al arco y logró completar tres de los cuatro de los mano a mano que tuvo. En roles defensivos también destacó, ganando siete de los 11 cruces por tierra y seis de seis por aire.
En esa búsqueda por mejorar, encontró en Alexis Sánchez a un gran compañero. Ambos jugadores mostraron una gran comunicación durante el encuentro y sin dudas los consejos del delantero del Inter de Milán hicieron efecto. Valdés por su parte adoptó esa postura y también fue un constante soporte de sus compañeros, buscando siempre guiar al equipo. Tanto en la moral como en el juego.
Figura en México
Lo cierto es que esta realidad de aciertos y cuestionamientos en Chile, es algo que en México no está ni cerca de experimentar. Desde su paso por el Morelia que el nombre de Diego Valdés genera devoción en la Liga MX, siendo siempre un jugador destacado dentro de la liga. Sin ir más lejos, el América pagó 12 millones de dólares al Santos Laguna por su pase, transformándolo en fichaje récord para las Águilas, donde ya es titular indiscutido. En esa misma ventana de traspasos, antes de fichar por el equipo de CDMX, también fue sondeado por Watford, Benfica y Villarreal.
Tal ha sido su impacto en el grande mexicano, que ya aseguraron su renovación hasta 2026. Una extensión de contrato que evidencia la importancia que tiene dentro del club: es el mejor pagado del club con 3.5 millones de dólares por temporada, se transformó en segundo capitán y además le pusieron una clausula de 30 millones de la divisa norteamericana para equipos de la misma liga.
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