Francia 2023 terminó el domingo para los Cóndores, pero el vuelo hacia el alto rendimiento sigue. De hecho, cuando en el país europeo aún se disputa la fase de grupos del torneo, la Federación Nacional de Rugby ya piensa en Australia 2027, la próxima cita planetaria que tendrá el deporte de la ovalada. En la organización esperan cambios en World Rugby para potenciar una nueva clasificación, con Pablo Lemoine a la cabeza. “Por lo menos el próximo ciclo me toca a mí, así que voy a tratar de dar lo mejor para que esto crezca”, destacó el charrúa al terminar el duelo ante Argentina.
Es justo ese objetivo de crecimiento el que aborda Cristian Rudloff, el timonel de la actividad a nivel nacional, con El Deportivo. Dos temas fluyen en la conversación: la opción de aumentar los participantes a los Mundiales y el deseo de crear una competencia anual que reúna a países de América, Asia e islas del Pacífico y que potencie el nivel competitivo de la escuadra nacional.
El primer tema que comenta el dirigente fue la opción del aumento de cupos, a 24, para el Mundial de Australia 2027. Sería la primera expansión desde 1999, cuando se pasó de 16 a las 20 naciones que lo disputan actualmente. Se trataría, por cierto, de una gran chance para Los Cóndores y para las naciones emergentes, considerando que para cada proceso sólo hay ocho cupos disponibles. Las tres selecciones mejor posicionadas en cada grupo de Francia 2023 asegurarán su presencia en tierras oceánicas.
Rudloff es claro en apuntar que ha estado luchando por esa opción en Francia y que los dirigentes de World Rugby también ven con buenos ojos la opción. Sin ir más lejos, hace poco, Alan Gilpin, CEO del ente que regula el rugby mundial, analizó la materia con medios europeos, poniendo el ejemplo de los Cóndores para justificar una posible expansión. “Creo que hay que hacerlo. Solo hay que comprometerse con ello y luego invertir en los programas de alto rendimiento de los equipos. Chile tuvo un partido difícil contra una Inglaterra muy fuerte y también jugó brillantemente contra Japón el primer partido de este Mundial. ¿Qué tan increíble ha sido Portugal en este torneo? Recién es su segunda vez en el Mundial de Rugby; Chile por primera vez. Las señales son muy positivas”, expresó.
En los últimos días, otros medios británicos dieron por hecha la expansión del torneo para 2027, promoviendo un formato de seis grupos de cuatro equipos.
Las revelaciones ilusionan a Rudloff, quien durante su estadía en Francia sostuvo muchas reuniones buscando concretar el cambio. “Demostramos en la cancha que Chile está preparado y merece estar en la élite del rugby mundial. Hoy hay 24 países de nivel mundial que están preparados para competir, por lo que no hay razones para no aumentar los cupos”, señala a La Tercera, apuntando a que el argumento que tenía World Rugby en un pasado para no expandir, los posibles resultado demasiado abultados, ya no es válido.
Una competencia anual para Chile
Rudloff asume que para que un Mundial de 24 países resulte exitoso habrá que generar más competencias para las naciones Tier 2. Chile, por ejemplo, llevaba desde 2021 jugando solo en las ventanas internacionales de mitad de año y noviembre, permitiendo muy poco margen para siquiera acercarse al nivel de las potencias.
Desde hace unos años que viene sonando la opción de formalizar el Americas Pacific Asia Championship, un torneo anual que reúna a las selecciones más fuertes de dichas regiones. Incluso, en 2022 se dio por hecho que Chile, Uruguay, Canadá, Estados Unidos, Tonga, Japón, Fiji y Samoa serían los participantes. Seis de esas naciones estuvieron en Francia 2023 y Fiji está a una victoria (juega hoy a las 16.00 ante Portugal) de clasificarse a los cuartos de final.
“Queremos participar de la competencia y World Rugby está haciendo todo lo posible por confirmarla”, expone Rudloff, quien es cauto al referirse a la intervención en el evento como una certeza, ya que todavía hay puntos que tienen que definirse. “Se están ultimando detalles. Es una competencia compleja desde el punto de vista financiero, porque claramente requiere muchos recursos y eso es lo que estamos buscando conseguir”, añade.
Dicho evento, además, permitiría que Chile nuevamente tuviera un torneo fijo en su calendario, tras la eliminación del Americas Rugby Championship que se disputó hasta 2019. Esto lo pondría en igualdad de condiciones, al menos en partidos oficiales, con las selecciones Tier 1, que además de las ventanas internacionales, cada año juegan el Seis Naciones o el Rugby Championship.
“Sería una competencia soñada que nos permitiría tener un calendario mucho más exigente para nosotros, que nos obligaría a subir el nivel y prepararnos más rápidamente”, sostiene el dirigente nacional.
Expansión en el continente
Además del plan de entrenamiento de Pablo Lemoine, la creación de la SLAR fue un factor clave en el alza de nivel de los Cóndores. El torneo de franquicias sudamericanas, que esta temporada pasó a llamarse Super Rugby Americas, permitió que los jugadores chilenos no tuvieran que emigrar para tener competencia y realizaran todo el proceso bajo el control el staff nacional. Esa sola condición mejoró la química y mantuvo los estándares de entrenamiento que exigía el uruguayo.
Para Rudloff, este es el momento de dar el siguiente paso. “Estamos trabajando de manera paralela en construir una segunda franquicia en el plazo más breve posible. Nuestro objetivo en un futuro sería tener tres o cuatro franquicias en Super Rugby Americas, que nos permitan ampliar la base, siempre mirando más menos a modelos que tienen otros países del primer nivel mundial como Escocia, Irlanda o derechamente como Sudáfrica y Nueva Zelanda”, señala. Fue justo con esas potencias con las que el presidente de la ovalada nacional mantuvo reuniones de camaradería en Francia. Intento sacarles máximo provecho: aprendió de sus sistemas y recibió información clave para seguir potenciando las estructuras de la actividad a nivel local.
Todo esta revolución tendrá a Pablo Lemoine liderando a la cabeza. El uruguayo ya confirmó que seguirá con Chile durante el siguiente proceso mundialista, por lo que se mantendrá como head coach de los Cóndores al menos hasta los partidos clasificatorios de 2026.