Se impuso el favorito. En rigor, los favoritos. La Copa del Mundo 2026 será organizada por Estados Unidos, México y Canadá, luego de que la candidatura compartida por las naciones de Norteamérica derrotara a Marruecos en la votación realizada ayer en Moscú, en el marco del 68º Congreso de la FIFA, justo en vísperas del inicio de Rusia 2018. Fueron 134 votos para el bloque (el 67 por ciento de los sufragios), contra los 65 de los africanos.
La cita de 2026 será histórica por diferentes razones. Una es que por primera vez tres países organizaran semejante cita. El antecedente más parecido fue Corea-Japón 2002. Además, será el primer Mundial con 48 selecciones, un paso adelante para el afán de la FIFA en expandir un negocio altamente lucrativo como es la Copa del Mundo. Eso sí, desde la Conmebol han manifestado su interés de que en Qatar 2022 ya hayan 48 equipos. México será el único país en albergar tres Copas del Mundo, luego de ser en exclusivo el local en 1970 y 1986.
Aunque sea un certamen con tres organizadores, el peso de la competencia recaerá de Estados Unidos, porque recibirá 60 de los 80 partidos (todos desde cuartos de final). Los otros anfitriones recogerán 10 cada uno. Una gran ventaja para el trío que se adjudicó el Mundial pasa por la promesa de generar 14 mil millones de dólares en ingresos, además de no invertir en exceso en infraestructura porque los estadios están. Serán 16 y el MetLife Stadium de Nueva Jersey, el mismo de la final de la Copa América Centenario 2016, es una carta para el juego de desenlace. El presupuesto de inversión es, aproximadamente, de US$ 2.160 millones.
¿Cómo impacta a Chile? Salvo Brasil, todas las federaciones de la Conmebol votaron por el bloque norteamericano. Al haber más selecciones, crece el número de cupos para cada confederación. En ese sentido, Sudamérica tendrá seis cupos directos para 2026 (hoy son cuatro). El resto de las plazas serán: 16 para Europa, nueve para África, ocho para Asia, seis para Concacaf y uno directo para Oceanía. Los dos cupos restantes saldrán de un torneo de repechaje que tendrá a seis selecciones, una por confederación menos la UEFA.
Aunque parezca increíble, los organizadores no tienen segura su presencia en la cita. "La Concacaf tiene ahora que discutir cómo organiza su clasificación", declaró el presidente del ente rector, Gianni Infantino. Será el Consejo de la FIFA el que determinará si los tres se quedan con la mitad de los puestos asignados.
Serán 32 los días de competencia, pese al incremento de selecciones, partidos y una ronda más (dieciseisavos). Esto se explica por un cambio importante en la primera fase. Serán 16 grupos de tres equipos (ya no ocho zonas de cuatro) y los dos primeros avanzan de fase.
Más allá de lo deportivo, esta elección tiene varios matices, más político, debido a las diferencias del mandamás estadounidense Donald Trump con sus países vecinos (la construcción de un muro en la frontera con México es el ejemplo más claro de aquello). También no hay que soslayar el judicial, porque EEUU es quien lidera la investigación por corrupción que remeció a la FIFA. "Cuando nos ayudan en la lucha contra la corrupción, desde luego que estamos complacidos", dijo Infantino.
¿Y el 2030? Buscando conmemorar los 100 años del primer Mundial, Argentina y Uruguay han manifestado su interés en albergar la Copa ese año, asociándose con Paraguay. No obstante, puede ser un obstáculo para sus intereses que ocurran dos Mundiales seguidos en América, por el principio de rotación que se viene dando en la elección de las sedes. En ese sentido, cobra relevancia la intención de Inglaterra para una futura candidatura, probablemente aliándose con otros países del Reino Unido (Gales y Escocia, en particular). Pese a esto, en Uruguay consideran que no afectará. "La rotación no se hace en base a continentes sino a confederaciones", afirmó Fernando Cáceres, secretario nacional del Deporte uruguayo. El voto en bloque de la CSF, trascendió en Moscú, tiene como moneda de cambio recibir la misma mano cuando toque la elección de 2030.
Por la cantidad de selecciones y logística de un Mundial, es muy probable que, de aquí en adelante, las sedes sean compartidas.