La Roja cuenta las balas

Se terminó. Chile quedó eliminado de la Copa América tras caer goleado ante Perú en semifinales. Y aunque le queda el consuelo de disputar el tercer lugar ante Argentina, mañana, en Sao Paulo, el objetivo principal ya no se alcanzó. El torneo sigue, pero más bien empieza a ser parte del pasado para la Selección.

Brasil 2019 era una de las últimas oportunidades de la generación dorada del fútbol chileno para estirarse. Sin embargo, se quedó en el camino cuando menos se esperaba. El tiempo está pasando y las balas se le van agotando a la Roja más exitosa de la historia. ¿Qué le va quedando? Luchar por la Copa América 2020, que se disputará en Argentina y Colombia, y clasificar al Mundial de Qatar 2022, cuyas Eliminatorias comienza en marzo del próximo año.

No todos llegarán a la Copa del Mundo. Algunos se quedarán en el camino. Quizás varios. Y en caso de sobrevivir al paso del tiempo y mantenerse competitivos, la máxima cita que se avecina sin duda marcará el fin de un grupo que a su vez marcó a todo un país con dos campeonatos continentales.

La edad y el físico irá determinando quién o quiénes seguirán a bordo de un barco que va llegando a su fin, que necesita nuevos pasajeros para reinventarse, como Pulgar y Maripán. Ambos jugadores terminan con saldo positivo, sobre todo el volante central, que se consolida como el acompañante de Vidal y Aránguiz en el mediocampo. Mientras que el defensa hace lo propio como dupla con el capitán Medel en la zaga.

Quien perdió bonos fue Gabriel Arias, independientemente de lo que suceda ante la Albiceleste mañana, en el Arena Corinthians. El arquero tuvo un certamen para el olvido. No pudo contra la presión del puesto ni con la enorme sombra de Claudio Bravo, que se fue agigantando cada vez más hasta opacarlo totalmente luego de su pésima salida en el segundo gol incaico.

Más allá de la decepcionante actuación de la Roja ante el conjunto dirigido por Gareca, Rueda fue otro de los ganadores. Llegó a la Copa con la soga al cuello, obligado a hacer más que un buen papel para que su continuidad no peligrara, y cumplió. La selección chilena mostró cualidades que no había exhibido en 18 meses al mando del colombiano y volvió a ser competitiva.

Por lo mismo, Sebastián Moreno, presidente de la ANFP, respira tranquilo. En la primera competencia oficial a cargo del cafetero el equipo llegó a instancias finales. Desde el organismo señalan que la evaluación se hará con calma en Santiago, durante los próximos días, pero adelantan que será positiva, que se lograron los objetivos mínimos, por lo que el proceso continuará. A menos, claro, que sea el propio DT quien tome la determinación de marcharse, lo que califican como improbable desde la federación. Además, existe una alta cláusula de salida, equivalente a un año de sueldo, que tiene que pagar la parte que rompa el contrato.

Lo que viene ahora es el partido con la selección que comanda Messi. Un duelo que en septiembre se volverá a repetir, cuando Chile y Argentina jueguen un amistoso en Estados Unidos. El otro rival será Honduras, escuadra a la que el caleño clasificó al Mundial de Sudáfrica 2010.

Para el duelo ante la Albiceleste, no hay muchos días de descanso, por lo que en el cuerpo médico de la Roja tienen pocas esperanzas de que Vidal se recupere del esguince en el tobillo izquierdo. No se atreven a descartarlo, porque saben que siempre quiere jugar por la Selección. Hoy seguirá con el tratamiento para bajar la inflamación que lo hizo jugar cojeando. Gary Medel también es duda por un esguince de tobillo, aunque su situación es similar a la del Rey y llevada con cuidado por los kinesiólogos.

Más allá de las lesiones, Rueda quiere terminar la Copa en el mejor lugar posible. Y aunque Vidal haya dicho que el partido no tiene sentido, el colombiano quiere ganarlo y estar en el podio. Desde la concentración adelantan que el duelo se lo tomarán con máxima seriedad y que irán con su mejor contingente, aunque el DT no se complica en hacer variantes si sus figuras no se recuperan.