La Roja Femenina saltaba a la cancha del Bicentenario de La Florida para dejar atrás el bochornoso final de los Juego Panamericanos. Desenlace que tuvieron que enfrentar sin arqueras, la delantera María José Urrutia tuvo que ponerse los guantes, y con sólo 13 jugadores disponibles.
Pero ante Perú, el rival elegido, la oncena que dirige Luis Mena también tenía gran misión: reinventarse tras la decisión de Christiane Endler de retirarse de la Selección. Por lo mismo, todas las miradas estaban puestas en el desempeño de Antonia Canales: la portera del Valencia que tuvo que ver la obtención de la medalla de plata en Santiago 2023 por televisión, pues ese fin de semana se dio su estreno como titular en la Liga F.
Y ‘Bambi’, es el apodo de Canales, respondió a cabalidad, por que si bien las visitantes llegaron muy poco, en la más clara que tuvieron -Pierina Núñez entró sola al área chilena- reaccionó de manera formidable (43′).
En tanto, en el área contraria, las locales no lograban abrir la cuenta. Lo tuvo Javiera Grez (17′), Karen Araya (26′) y nuevamente Grez (41′), pero la pelota no quería entrar. Por lo que Chile debió esperar hasta el complemento para desahogar el grito de gol que tenía atorado en la garganta.
María José Urrutia, de poca acción en el inicio, se comió la banda derecha y cuando entraba al área es derribada de manera alevosa. Penal. Y Yanara Aedo no falla: con un tiro al primer palo venció a la portera Maryory Sánchez.
Pero los cambios, sobre todo la salida de Grez, descolocaron a las anfitrionas e hizo crecer a las del Rimac. Tanto así que a los 66′, tuvieron el empate con un hermoso tiro libre de Nahomi Martínez que dio en el travesaño.
Alerta que volvió a despertar a las nacionales, las cuales dominaron hasta el final y que tuvo entre sus filas a dos debutantes en el primer equipo: Agustina Heyermann y Melissa Bustos. Las mismas que jugaron pocos minutos, pero que vieron en cancha como Canales salvaba su arco en el minuto 88, cuando sacó de la línea un remate foráneo.
Jugada que fue la última emoción del encuentro, compromiso que sirvió para lavar las heridas del conjunto de Mena, el mismo que el próximo martes volverá a enfrentar a este rival.