Cuando restan solo cinco fechas para el final de las Eliminatorias Sudamericanas, las diez selecciones ya empiezan a sacar severas conclusiones, tanto en la parte alta como en la baja de la tabla de posiciones.

Tal es el caso de la selección de Uruguay, la escuadra que dirige Marcelo Bielsa que está en el cuarto puesto, después de la impensada caída ante Argentina en el estadio Centenario de Montevideo.

“Lo negativo es la falta de peligrosidad que se hizo evidente en los momentos que tuvimos dominio; no logramos traducir el dominio en situaciones de peligro”, explicó Bielsa tras la derrota que cortó una racha de tres fechas invicto, claro que con dos empates.

En lo inmediato, la Celeste deberá visitar a Bolivia en El Alto a 4.150 m, partido que es vital para los altiplánicos, que todavía ostentan el séptimo puesto que otorga el cupo para el repechaje.

“Sabemos que jugar por encima de 4 mil metros aumenta la dificultad. El partido lo imagino con la limitante que significa la disminución que provoca la altura en el rendimiento físico, pero eso no invalida nuestra posición de ir a ganar el partido y creer que podemos hacerlo”, adelantó el técnico rosarino.

Dos bajas vitales

Pero la visita del Loco a Bolivia no está exenta de problemas. La Asociación Uruguaya de Fútbol confirmó que los jugadores Giorgian de Arrascaeta y Nicolás de la Cruz fueron liberados de la selección uruguaya. En concreto, los dos futbolistas de Flamengo de Brasil no viajarán para el partido ante el equipo de Óscar Villegas.

De Arrascaeta fue titular frente a los campeones del mundo y salió poco antes del descanso por una molestia física. Entonces fue reemplazado por su compañero en el Mengao, también desafectado.

“Tuvo una molestia en el aductor y no pudo continuar”, dijo el rosarino frente a la consulta de los periodistas. Además, confirmó que ya venía con problemas de Brasil cuando se sumó a la convocatoria.

De la Cruz, en tanto, disputó el final de la primera parte y todo el tiempo complementario sin lograr gravitar en el duelo. Además, el cuerpo técnico no quiere arriesgarlo en la altura ante cierta fragilidad física.

Los bolivianos suman 13 unidades, cuatro más que la Roja, en la clara disputa por acceder a la última plaza que otorga opciones para clasificar a la Copa del Mundo de 2026.